Diario de León

«La élite importa, pero lo esencial para el Ayuntamiento es la base»

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ÁNGEL FRAGUAS | LEÓN

Vicente Canuria, concejal de Deportes de León, tiene muy claro su cometido desde que ocupó el cargo. «Las Escuelas Deportivas Municipales son mi ojito derecho y vamos a mantener lo que hay e incluso potenciarlo», afirma.

—Desde que tomó posesión como concejal de Deportes, ¿qué es lo que más le ha llamado la atención dentro del deporte leonés?

—Me ha llamado la atención el nivel de las instalaciones deportivas y las municipales en general. Necesitan un plan urgente de mantenimiento y reparación que hay que empezar a abordar inmediatamente. La oferta deportiva ha crecido y las instalaciones no se han mejorado.

—¿Qué mantenimientos y reparaciones son necesarios?

—Haremos un estudio de todas las instalaciones para repararlas y acondicionarlas. Antes de llegar nosotros se atendía a inversiones claramente electoralistas. Por poner un ejemplo, es curioso que un integrante de Ciudadanos se presentara en el Hispánico y le dijera a nuestros técnicos que él hubiera hecho las obras de otra manera. Es curioso, porque fue el grupo político al que pertenece el que promovió la modificación de ese recinto deportivo. Las obras realizadas en el Hispánico no se corresponden a las que se necesitaban y se han quedado cortas. No responden a las necesidades que se tenían. Tenemos que hacer un plan para las instalaciones urgentes y hay que abordar y priorizar las más importantes.

—¿Qué obras son más urgentes?

—No creo que haya ni una instalación que no necesite su propio plan de acondicionamiento, pero es preciso priorizar. Lo que vamos a hacer es cumplir con nuestras promesas electorales. Prometimos en campaña construir un campo de hierba artificial en La Granja que mejore las necesidades del fútbol base en León. Ese plan de campo de hierba artificial pretendemos presupuestarlo para el ejercicio 2020. Hay otras obras que tenemos que hacer, pero todo depende del dinero del que dispongamos. Para eso hay que tener un presupuesto y ahora no lo tengo. Cierro el año con lo que me queda. Prácticamente todo está gastado. Estamos intentando elaborar un presupuesto que cubra todas las necesidades que hay para mejorar las instalaciones deportivas. Queremos resolver esas necesidades. El foco de la prioridad lo situamos en el deporte base. A los clubes de élite vamos a seguir apoyándolos porque es marca de León, pero quiero dejar claro que nuestra prioridad va a ser el deporte base. La élite importa, pero lo esencial para el Ayuntamiento es la base. Vamos a fomentar la práctica de los deportes autóctonos, aunque eso me gustaría abordarlo con la Diputación Provincial. También tenemos la intención de seguir fomentando las becas de la Residencia Doña Sancha, que no sabemos qué ha pasado con ellas.

—¿Qué va a suceder con el Pabellón del Ademar?

—Si un club como el Ademar quiera un pabellón va a contar con el apoyo del Ayuntamiento, pero siempre que se haga con los límites de la legalidad. Para la dotación de equipamientos públicos necesitamos que se cumplan una serie de requisitos y uno imprescindible es que cuando yo doy, para fines sociales y deportivos, una finca o parcela pública es para eso, para fines sociales y deportivos sin ánimo de lucro. El ánimo de lucro prohíbe que ello pueda hacerse. Si existen otro tipo de posibilidades no me aparto de que lo propongan y se estudie por parte de los servicios jurídicos de la casa. De momento no hay ningún expediente abierto sobre la concesión de una parcela o terreno al Ademar.

—¿De qué salud goza el deporte leonés?

—Las escuelas deportivas son algo muy importante. Lo esencial del Ayuntamiento es preocuparse porque niños y niñas puedan tener su formación en ellas. Es un proyecto de ciudad. En cuanto a los clubes de élite están pasando, unos más y otros menos, por dificultades como consecuencia de la crisis económica. Quizás necesiten medidas que exceden del campo municipal. Estoy pensando en la ley de mecenazgo, en medidas fiscales que pudieran beneficiar a los patrocinadores para que se beneficien de ese retorno que el patrocinador busca, para que los clubes puedan beneficiarse en lo económico. Las subvenciones a los clubes deportivos están en precario porque no hay dinero. Estamos en un plan de ajuste. Nuestra labor, que no puede ser económica, es estar con las personas con el objetivo de encontrar patrocinadores.

—¿De qué depende el deporte de León?

—De la repuesta de la empresa privada. En la campaña electoral, nuestro alcalde proponía la creación de distintos órganos y de distintas instituciones por las que buscábamos el concurso público privado. Esa es la línea por la que vamos a seguir. Hay que tener en cuenta, como decía, que existe un plan de ajuste por el que tenemos que abordar muchas más tareas con menos personal municipal del que teníamos. Estamos en una situación complicada, pero en meses podemos recuperarnos en tanto en cuanto bajemos ese nivel de deuda del 110% para realizar las inversiones en servicios y mejorar esas instalaciones deportivas de las que disponemos. Queremos el mismo nivel de oferta de Escuelas Deportivas con el añadido para este año de tres nuevas modalidades (artes marciales, kung-fu y marcha nórdica), además de crear una bolsa de empleo de monitores deportivos para así cubrir posibles bajas. Las Escuelas Deportivas son mi ojito derecho.

—En cuanto a los clubes de élite, ¿ya ha tenido algún contacto con Aspire, propietaria de la Cultural?

—Ya he tenido contactos con la Cultural este verano y esta misma semana hablaré con Aspire. Sé que el alcalde ya ha tenido algún contacto con la Academia de Catar. Al patrocinador de la Cultural lo que tenemos que decirle es que aquí nos tiene para que les echemos una mano y que ellos puedan continuar para que el nombre de la Cultural pueda estar en los niveles más altos del fútbol español, incluso en Primera División. Si Aspire necesita que le demos cariño, ese cariño lo tiene para que continúe aquí en León mucho tiempo. Hay un convenio con la Cultural y somos escrupulosos con el que este Ayuntamiento haya firmado para el uso del estadio y las instalaciones del Área Deportiva. Si ese convenio tiene que modificarse ya se verá cuáles son las futuras necesidades.

—Qué va a hacer el Ayuntamiento para que el Ademar siga codeándose con los mejores?

—Cuando una ciudad pone el nombre de una calle al Ademar es por algo. Es porque esta ciudad está muy agradecida al Ademar. Queremos que el Ademar siga siendo una realidad. Lo que sucede es que este Ayuntamiento tiene problemas económicos y eso hace que nos afrontemos a la realidad sin fantasías. Cumpliremos las promesas que sí podamos hacer. Ya he hablado con Tano Franco y ha lanzado su idea del pabellón, pero no de manera formal. Tiene que tirar por los intereses del Ademar y yo por los intereses legales del Ayuntamiento. Las promesas de subvenciones por parte del anterior equipo de gobierno aquí no constan, porque no hay ningún papel que así lo soporte. Y digo esto porque serían promesas verbales, pero no firmadas y avaladas por el interventor, porque además ha sido el propio interventor el que me ha confirmado que no hay pendiente ninguna subvención al Ademar. Queremos ayudar al Ademar en todo lo que podamos, pero siempre por el camino recto de la ley.

—¿Qué pasa con el baloncesto en León?

—Para mi el baloncesto es una pequeña espina en el corazón. Yo viví en primera persona la fusión de los dos grandes clubes de baloncesto de León, el Olímpico Nelson y el Baloncesto Elosúa León. Si esa fusión se hizo una vez supongo que se pueda hacer más veces. Si supimos poner al Baloncesto León en la élite puede conseguirse de nuevo. Los problemas se resuelven hablando con la gente de baloncesto, sumando sinergias y con el apoyo del Ayuntamiento podremos ver al baloncesto antes de que finalice el mandato en las grandes cumbres que jamás tendría que haber abandonado. Me fastidia no tener en León ahora mismo el gran baloncesto que tuvimos aquí. Pena no, porque sé que los clubes de León están trabajando con fuerza e ilusión.

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