Diario de León

Balonmano | De la liga Asobal a Europa

A Europa para cerrar las heridas

El Ademar recibe mañana al Metalurg en busca de un triunfo que corte la mala racha Los de Cadenas quieren ofrecer el mismo nivel que ante Toulouse

León

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Mostrar la misma —o mejor— imagen que frente al Toulouse. Ese es el mantra que se repite el Abanca Ademar una y otra vez en su regreso a la Liga Europea de Balonmano, donde mañana recibirán al RK Metalurg Skopje en la tercera jornada de la fase regular. Los de Cadenas no andan finos, sobre todo en la competición nacional, en la que acumulan tres derrotas —las dos últimas consecutivas contra Anaitasuna y Logroño— y cinco triunfos. No está siendo una temporada sencilla. La pandemia continúa pasando factura y los numerosos cambios que se han dado en la plantilla leonesa tampoco ayudan. Falta contundencia en ambas áreas, más alternativas en ataque y blindar el centro de la defensa. La apuesta por la juventud del técnico de Valdevimbre tiene sus riesgos y sobre todo necesita de tiempo, algo que en esta 2020-21 escasea.

El ejemplo a seguir

Pese al empate, el mejor encuentro del Ademar esta temporada fue contra los franceses

Pero dentro de las malas sensaciones que transmite el equipo queda en la retina el encuentro ante los franceses. Es, hasta la fecha, el mejor que han completado los ademaristas este curso. El único borrón, eso sí, se produjo en los minutos finales, cuando los locales dilapidaron una ventaja de hasta cinco goles para acabar cediendo un empate. Pese a ello, el Ademar se conjura para repetir las buenas sensaciones de aquella jornada 2 europea. Necesitan completar un partido perfecto de principio a fin, algo que todavía no se ha dado.

Con el nuevo formato ahora son los cuatro primeros equipos —y no solo dos— los que pasarán a la siguiente fase de la antigua Copa EHF. Y de momento, el Ademar ocupa esta última plaza con ‘premio’ aunque solo lleve un punto y tenga pendiente el duelo de la jornada inaugural ante el Chekhovskiye Medvedi. Hacerse fuerte en el Palacio se antoja capital para que los leoneses sigan vivos en la segunda máxima competición europea y su rival de mañana —aunque superior sobre el papel— no llega en su mejor momento.

Asegurarse un triunfo podría resultar balsámico para un Abanca Ademar al que le está constando en exceso imponer su modo de juego en sus partidos, sobre todo cuando juegan en casa. Ante Logroño las sensaciones fueron malas desde prácticamente el primer minuto y lo peor es que no dio la sensación de que pudieran tomar el mando en ningún momento. Ahora les llega una nueva oportunidad de dar ese paso adelante que tanto exige su entrenador. Un cambio de rumbo que empiece por Europa.

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