Éxito de bronce para Alba Sánchez

Alba Sánchez recordará su participación en el Campeonato de España de rallyes de asfalto 2019 como único. Y con letras de bronce, el mismo metal de la copa que junto a su compañero de equipo en Hyundai, Surhayen Pernía, levantaba la leonesa.

Un hito para la historia del automovilismo leonés que con Alba se ha convertido este año en protagonista de un Nacional que ayer bajaba el telón con el Race-Comunidad de Madrid. Un bronce que por muy poco, apenas ocho puntos, no se tornaba en plata, puesto en el podio que iba a ocupar otro piloto de Hyundai, Iván Ares con el que Pernía y Alba rivalizaban en la entrega final del certamen por el subcampeonato.  

En un escenario que también era valedero para el Supercampeonato de España, Alba y Surhayen llegaban con su Hyundai i20 R5 dispuestos a mantener su segundo puesto en la general. El podio ya lo tenían asegurado una vez que su regularidad y éxitos a lo largo del certamen lo habían hecho posible. El título ya era, al menos este año, cosa de Pepe López con su Citroën C3 R5.  

Dos jornadas con ocho tramos, incluidas cuatro pasadas por el circuito del Jarama en diferentes variantes iban a dictar sentencia. Y con la climatología adversa también como acompañante.  

En el primer tramo cronometrado, el del Puerto de la Puebla con 15,8 kilómetros, Alba y su compañero Surhayen sólo eran superados, por dos décimas, por el Skoda Fabia de Xevi Pons. Leonesa y cántabro empezaban fuerte y apostando por el triunfo. La misma posición iban a ocupar en el segundo de los tramos, El Berrueco, en el que sobre 10,5 kilómetros, sólo Iván Ares firmaba el mejor crono. El premio provisional se lo apuntaban Alba y Pernía que pasaban a liderar la prueba. Una nueve entrega por el tramo del Puerto de la Puebla mantenía a la leonesa y el santanderino en la zona alta de la clasificación. En este caso en un intenso mano a mano con Ares, su rival por el subcampeonato, y Pons, con Pepe López, el ya campeón del certamen, a la expectativa.  

El Berrueco nuevamente y el Jarama iban a cerrar la primera jornada. Alba y Surhayen transitaban por entonces en la tercera posición de la general a 17 segundos de Ares tras ceder un poco más de lo previsto en el tramo con pasada por el circuito. Eso sí, salvable en la segunda jornada con otros tres tramos con protagonismo también para el trazado de velocidad. Si en el quinto tramo Alba y su compañero de Hyundai cedían un puñado de segundos, en el sexto lograban sacarse la espina haciendo el scratch y con ello recortando distancias. Apenas 8 segundos con el líder y con dos tramos por completar. En el séptimo se dejaban unos pocos pero lo peor iba a venir en el octavo en el que un inoportuno pinchado hacía que las opciones de la leonesa y el cántabro se esfumaran al ceder más tiempo del posible e irse a la cuarta posición del rallye. Eso sí, el podio en la general del Campeonato no iba a peligro. Lo único que de la posible plata se pasaba al bronce. Un metal también destacado para la leonesa que en su estreno en un equipo oficial lograba un hito para el automovilismo leonés.  

Además contribuía al título de marcas de Hyundai para subir también al podio en la general de copilotos y en el caso de la categoría femenina ser la mejor en este apartado.  

Un bagaje espectacular para Alba Sánchez que cierra un año brillante en el que ha sido asidua junto a Surhayen a los podios del certamen, incluyendo un triunfo en el Rallye de Santander. Ahora tica disfrutarlo para la leonesa y empezar a pensar en el 2020 donde a buen seguro seguirá estando en la órbita de Hyundai y luchando por un lugar en el cuadro de honor del Nacional pensando en cotas importantes.