El Girona se impone con contundencia al Tenerife y logra el ascenso a Primera División

Se acabó el curso y el Girona, que terminó sexto en el torneo de la regularidad y había fallado en los duelos decisivos de las dos últimas campañas, consumó el ascenso a Primera tras ganar en Tenerife (1-3) como ya hizo antes en Eibar. Premio extraordinario para el equipo que mejor jugó y más intentó atacar y mérito enorme de Míchel, un entrenador al que le gusta el fútbol vistoso y ofensivo, que ya logró sendos ascensos con el Rayo y el Huesca y que consumó el tercero en seis años. Brillante.

Protagonismo especial en estas eliminatorias para Cristhian Stuani, que tuvo muchas novias tras el descenso en 2019, pero decidió seguir en Girona y la historia se lo premió a sus 35 años. Castigo para la propuesta más bien rácana de Ramis, que le dio resultado en el derbi ante Las Palmas pero se le vino en contra en el momento decisivo. No cumplen los insulares el sueño de volver entre los grandes en el año del centenario.

Las tablas de Montilivi dejaron las opciones para ambos equipos intactas en este segundo y definitivo asalto, motivo por el que era previsible un duelo muy contenido en el Heliodoro. Partía con ligera ventaja el Tenerife por su condición de local y porque en caso de empate tras una hipotética prórroga serían los blanquiazules quienes consumarían el ascenso. Pero el Girona fue quien logró el ascenso.