Diario de León
Robert Lewandowski y Thomas Mueller se reencontraron con motivo del partido de Champions. WITTEK

Robert Lewandowski y Thomas Mueller se reencontraron con motivo del partido de Champions. WITTEK

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Dura derrota del Barça en el Allianz Arena. El conjunto que dirige Xavi Hernández cayó por 2-0 en un partido en el que los azulgrana fueron superiores en algunos tramos de encuentro, pero en el que pagaron cara su falta de eficacia de cara a portería. El Bayern reaccionó a tiempo y, con goles de Lucas Hernández y Leroy Sané, castigó a unos culés que merecieron más, pero que tendrán que esperar para romper el gafe en Múnich, donde nunca han logrado conseguir un triunfo.

Un ambiente de partido colosal. Eso es lo que se encontró el Barcelona en el Allianz Arena. El equipo de Xavi salió al terreno de juego con más de 75.000 personas dispuestas a vengar la marcha de Robert Lewandowski y lo hizo sin el miedo escénico de otras ocasiones.

La receta de Xavi lo tenía todo. Incluía a Pedri como jefe absoluto en la sala de operaciones, a Gavi como un incansable recuperador, a Raphinha y Dembélé como dos flechas en los extremos y a Lewandowski como héroe del gol. Solo esto último le falló al de Tarrasa en un plan que pudo ser perfecto en la primera mitad. El Barça tuvo contra las cuerdas al Bayern durante muchos minutos, hizo que los de Nagelsmann cedieran metros y coleccionaron hasta cuatro ocasiones claras para adelantarse en el marcador. Lewy no acertó desde dentro del área ni con la diestra primero ni con la cabeza después, Pedri se topó con Neuer en un mano a mano y Raphinha no tuvo puntería en uno de sus clásicos zurdazos desde la frontal. Fue el mejor momento del Barça en el partido, un tren que en el Allianz no suele pasar dos veces.

Y así fue tras la reanudación. El Bayern dio un paso al frente con la entrada de Goretzka y en apenas ocho minutos todo el castillo de naipes que habían construido los azulgrana se vino abajo de forma dramática. En ese lapso los germanos avisaron con un disparo desde la frontal y castigaron a los de Xavi de forma cruel. Primero con una jugada a balón parado en la que emergió Lucas Hernández tras una mala salida de Ter Stegen y después con una vertiginosa acción individual de Leroy Sané dejando atrás rivales hasta definir con un certero disparo cruzado. En un abrir y cerrar de ojos el choque era otro totalmente diferente y las ocasiones falladas en la primera mitad resonaban como un martillo en la cabeza de los azulgrana.

Los goles no hicieron mella, eso sí, en un Barça que conocía el camino para hacer daño a los de Nagelsmann. Xavi movió piezas con la entrada de Frenkie de Jong y Ferran Torres, su equipo se rearmó y de nuevo volvieron las buenas sensaciones, pero la historia de la primera mitad se volvió a repetir. Los culés calcaron el plan inicial con la presión adelantada, embotellaron a un rival que estaba más cómodo que nunca al contragolpe y la madera se interpuso en una ocasión clamorosa de Pedri tras una pared con Lewandowski. Fue el último chispazo de un Barça que pagó cara la falta de puntería en el peor escenario posible. El que perdona al Bayern, y más en Alemania, se va de vacío. Tal y como sucedió.

tracking