Luis Enrique abre las puertas a Borja Iglesias y Nico Williams

Desde la sierra de Madrid y en bicicleta, acompañado de Aitor Unzué, miembro del staff técnico de la selección española absoluta e hijo de Juan Carlos Unzué. Así facilitó Luis Enrique su lista de convocados para los partidos de la Liga de Naciones ante Suiza y Portugal. Muy a su estilo, en pleno esfuerzo físico y bajo la inclemencia de las condiciones meteorológicas, como si se tratase del sinfín de debates y críticas que suscitan sus decisiones, el técnico asturiano anunció una nómina de jugadores marcada por la continuidad.

Tenía su miga esta convocatoria, pues sirve para sacar conclusiones de peso en la antesala del Mundial de Catar, el siguiente compromiso una vez solventada esta fase de grupos de la Liga de Naciones en la que España aspira a repetir presencia en la final a cuatro del mes de junio de 2023. Lo cierto es que apenas hubo sorpresas, más allá de la ausencia de Ansu Fati. Lucho sigue apostando por un trío de porteros -Unai Simón, Robert Sánchez y David Raya- que según sus propias palabras, le «encanta». Para la defensa descarta un hipotético regreso de Sergio Ramos y junto a los habituales Eric García, Pau Torres y Diego Llorente recluta a Guillamón en el centro de la zaga ante la ausencia del lesionado Laporte.

En el carril diestro se mantienen Carvajal y Azpilicueta, pero para el zurdo, además de Jordi Alba, recupera a Gayà en lugar de Marcos Alonso. El preparador asturiano apuesta por dos novedades en ataque, con la presencia de Nico Williams y Borja Iglesias como alternativas al bajo estado de forma de Ansu Fati, la lesión de Gerard Moreno y la extraña situación de Raúl de Tomás, que no podrá jugar hasta enero tras su convulsa salida del Espanyol rumbo al Rayo. Tampoco está Olmo por sus problemas físicos, pero la parcela ofensiva cuenta con las muchas posibilidades que ofrecen futbolistas tan diferentes como Sarabia, Yéremy Pino, Asensio o Ferran Torres.