Diario de León

PRIMERA DIVISIÓN

El trueno blanco adelanta el Halloween del Leganés (5-0)

El Real Madrid apabulla al colista con una primera media hora espléndida y cierra su primera goleada del curso con tantos de Rodrygo, Kroos, Sergio Ramos, Benzema y Jovic

El centrocampista del Real Madrid, Isco, disputa el balón ante el delantero del Leganés, Aitor Ruibal. JUANJO MARTÍN

El centrocampista del Real Madrid, Isco, disputa el balón ante el delantero del Leganés, Aitor Ruibal. JUANJO MARTÍN

Publicado por
ÓSCAR BELLOT | MADRID
León

Creado:

Actualizado:

La noche de brujas la vivió esta vez en el Santiago Bernabéu el Leganés y con un día de antelación. Se desquitó el Real Madrid del pepinazo copero de hace un par de temporadas con una goleada al conjunto blanquiazul tras una primera media hora primorosa de los blancos, que salieron en estampida para mantenerle el pulso al Barça y cerraron el choque en un abrir y cerrar de ojos con goles de Rodrygo, Kroos y Sergio Ramos, este último de penalti. Benzema, también desde los once metros antes de retirarse ovacionado en otra jornada espléndida del lionés, y Jovic, en su primera diana como madridista, cerrarían la cuenta en la segunda parte.

Soberbia actuación del conjunto de Zinedine Zidane, que de una tacada escaló cuatro puestos en la tabla, sacando partido a los tropiezos de Atlético, Sevilla y Real Sociedad, aunque a expensas de lo que haga este jueves el Granada en su visita al campo del Getafe para consolidar la segunda posición al cierre de la jornada y con un partido menos que los otros perseguidores del líder.

Sacó matrícula con su apuesta Zidane, que con las piernas de sus pretorianos aliviadas por el aplazamiento del clásico, calcó el bloque que venció al Galatasaray. Gran novedad en un técnico que había plantado doce alineaciones distintas en otros tantos choques esta temporada. Revolucionó en cambio su once Luis Cembranos, con apenas cinco supervivientes del triunfo ante el Mallorca a fin de dosificar esfuerzos para el vital pulso del domingo con un rival directo como el Eibar. Sólo Bustinza, en el bando blanquiazul, pervivía de aquella gesta que hizo aflorar los demonios del marsellés.

Con esa llaga aún presente en la memoria del madridismo, los blancos comparecían sin margen de error en uno de esos partidos trampa, entre semana y contra un rival de la parte baja. La última vez, el Mallorca les pintó la cara y les descabalgó del liderato. Con el Barça desplegando ahora velas al dictado de Messi, el Real Madrid no podía permitirse un nuevo paso en falso. Vaya si lo esquivó.

Interiorizada la lección, irrumpió esta vez con energía, concentración y compromiso la escuadra local. Salida en tromba que rindió frutos de inmediato. Filtró Rodrygo una bola extraordinaria a Benzema para articular una maravillosa acción colectiva. De Benzema a Marcelo, de éste a Hazard, vuelta al lateral brasileño para que centrase al '9' y servicio del ariete para que el ex del Santos, principio y fin de todo, sellase su segunda diana en su debut como titular ante su hinchada. El joven diamante brasileño ha caído de pie en el coliseo de Chamartín. Dos apariciones y otros tantos goles. Punta de lanza de un repertorio de recursos que hacen relamerse a Zidane.

Sin tiempo para reponerse del primer mandoble, el Leganés estaba de nuevo en la lona. Sirvió de nuevo Benzema y empujó esta vez Kroos, segundo máximo artillero ya de su equipo con tres dianas, el triple de las que facturó en todo el curso anterior. Vendaval local Avasallaba el Real Madrid a un Leganés desbordado. Los locales las tenían de todos los colores, ya fuera un latigazo ajustado al palo de Kroos que se marchó por centímetros o una chilena de Benzema que hubiera entrado derecha a la videoteca. Hazard quiso sumarse a la fiesta pero se topó con Juan Soriano, que lo derribó. Era el turno de Sergio Ramos, letal desde los once metros. Falló a la primera el camero, noticia bomba en un ejecutor de apabullante eficacia en semejantes lides. Mandó repetir Soto Grado al ver que el arquero no tenía ninguno de los pies sobre la línea como estipula la regla. Y, esta vez sí, el central dejó inmaculado su expediente: catorce goles en sus catorce últimas intentonas.

Duelo resuelto antes de la media hora y vía libre para que la parroquia blanca disfrutase sin cortapisas. Halloween se adelantaba para el Leganés, que hubiese tenido más sosiego leyendo a Stephen King. No estaba Jack Torrance pero sí Rodrygo, capaz de provocar más terror entre la zaga pepinera que el protagonista de 'El resplandor'. El extremo desbordó como el mejor Vinicius para entregarle en bandeja de plata el cuarto a Valverde que con todo a favor para firmar su primer gol de blanco, la envió al anfiteatro. Y se asoció luego con Hazard en otra jugada de fantasía que pilló dormido a Varane en boca de gol.

Estaba visto, los merengues disfrutaban de una película de Disney mientras el hombre de las sombras perseguía al conjunto del leonés Luis Cembranos. Oscar Rodríguez, mirlo blanco, convidó sin querer a la fiesta a Courtois con un trallazo que permitió lucirse al belga para espantar sus particulares brujas. Del Bernabéu salió descompuesto y pitado hace un mes el cancerbero belga. Al Bernabéu regresó entre aplausos en una noche plácida para él y su equipo que, una vez puestos los pelos de punta al colista, se gustó con Hazard y Rodrygo desatados y permutando bandas. La vuelta de Modric, atropellado también por Soriano en un penalti que certificaría Benzema, en el tramo final coronó una jornada bendita de los blancos pero pavorosa para el Leganés.

tracking