Reto mundial para Eduardo de Paz

MIGUEl ÁNGEL TRANCA | LeÓN

España levanta hoy el telón en el Mundial B júnior de curling. Y lo hace con el leonés Eduardo de Paz como su gran baza para no sólo mejorar el noveno puesto de la pasada edición, también para intentar pujar por un puesto en el podio que además de la consiguiente medalla reportaría a De Paz y sus otros cuatro compañeros el billete al Mundial A.

El viceskip leonés, que a pesar de su edad todavía júnior ya sabe lo que es competir en torneos absolutos (en más reciente el Europeo) cuenta con galones de líder junto a Gontzal García. Ambos ya disputaron el Mundial pasado y sobre ellos el seleccionador nacional, el canadiense Felipe D. Martin, ha asentado los objetivos españoles que pasan por dar un paso adelante creciendo en cuanto a nivel y presencia internacional.

De Paz, que ya cuenta con una medalla en un Europeo júnior, tendrá uno de los cometidos principales de una selección que en la primera fase que comienza hoy tendrá que medirse a otros siete rivales, algunos de ellos llamados a pujar por las medallas. La primera selección que Eduardo y sus compañeros (Gontzal García, Xavi Campos, Andy García y Alberto Ramiro) se van a encontrar en el camino será la de Dinamarca. Frente a los nórdicos España debe empezar a mostrar sus bazas. Y eso pasa por buscar la victoria frente a un enemigo de cuidado aunque a priori accesible para los españoles. Tras Dinamarca tocará mañana Holanda, un país que poco a poco está ganando presencia en los torneos aunque tampoco debe ser un escollo imposible para De Paz y el resto de internacionales españoles.

La tercera jornada será otro cantar ya que el rival con el que tendrá que lidiar la selección será Inglaterra. Frente a los británicos España y De Paz ya se han visto las caras en otras ocasiones con resultados dispares aunque en algunos de ellos favorables lo que sin duda alguna, y con un año más de experiencia, debe servir para buscar un resultado positivo que empiece a apuntalar las opciones en el torneo.

China el día de Reyes, Hungría el 7 de enero y Eslovenia y Eslovaquia en una jornada doble completan el camino del combinado nacional en la fase de grupos del Mundial de Suecia. Tras esos siete enfrentamientos Eduardo y sus compañeros buscarán hacer historia para el curling con la clasificación para los cuartos de final del día 9. Para ello el objetivo pasa por finalizar entre los dos mejores o como tercero de grupo (el que cuente con el mejor ránking de lanzamientos de los tres terceros se meterá en las eliminatorias de forma directa mientras que los otros dos tendrán que medirse entre ellos para completar el cuadro final).

España, que en el pasado Mundial acababa en el puesto 9 de los 24 participantes, buscará ahora mejorar esa clasificación. Con un plantel joven pero experimentado y de mucha calidad las opciones de dar un paso adelante son notables. En las últimas semanas los cinco jugadores entre los que se encuentra el leonés Eduardo de Paz ya han dejado patente su clase y posibilidades ante la élite internacional. Ahora toca refrendarlo en un Mundial cuyo grupo no ha sido el más accesible para los hispanos con la presencia de rivales de la talla de Eslovenia, Eslovaquia, Inglaterra y Dinamarca, todos ellos llamados a pujar por entrar en el top-4. A favor de España cuenta su potencial como grupo y la calidad de las individualidades de Eduardo, Gontzal y Campos. También la experiencia adquirida a lo largo de los últimos años.

En el Ostersund Arena de Suecia deben demostrarlo desde hoy para hacerse con uno de los tres primeros puestos de su grupo, el B. Ganar en el estreno frente a Dinamarca será fundamental para empezar a mostrar sus bazas. Otra victoria frente a Holanda sería también un factor muy importante antes de enfrentarse a uno de los ‘gallos’ de esta fase, Inglaterra. Con cinco triunfos, tal vez con cuatro dada la igualdad entre cinco de los ocho equipos que conforman el grupo, la selección podría hacerse un hueco en la siguiente fase. Con ese billete ya habría mejorado lo del pasado Mundial. Aunque el reto es mucho más ambicioso para Eduardo de Paz y los otros cuatro integrantes del combinado español en Ostersund (Suecia).