Baloncesto | Liga femenina
Triunfo de fe del Pajariel Bembibre
Las bercianas sacan a relucir su garra para superar en un igualado pulso al Zaragoza
El Pajariel Bembibre se mostró solvente bajo aros. ANA F. BARREDO
El Embutidos Pajariel Bembibre jugó en casa su primer partido del año, logrando un merecido triunfo por 66-63 ante el Casademont Zaragoza, que la aleja de los puestos de descenso aunque no le ganó el basketaverage al perder en Zaragoza por cuatro puntos de diferencia.
De salida, un parcial de 0-7 puso las primeras ventajas en el marcador para las mañas. Lograron igualar las de Vázquez pero otro parcial disparó la diferencia a diez para el Zaragoza 12-22 al final del primer acto. Las diferencias siguieron aumentando en el segundo cuarto 15-27 (14’), entrando posteriormente en una fase de errores en ambos equipos que no variaba un ápice el electrónico del Bembibre Arena. Con tiros libres, las locales bajaron a siete la diferencia, pero el juego se volvió espeso y sin frescura en el ritmo del partido. Se llegó al descanso con esperanzas de remontar y corregir fallos en un encuentro bronco y poco vistoso.
Tras el descanso, las cosas seguían igual, Gatling haciendo daño en la pintura y la falta de acierto en el Bembibre, dificultaba la idea de remontar un partido difícil, tocaba ponerse el mono de trabajo y bajar al barro con pico y pala. Se acercó a tres el Pàjariel, pero volvieron los fallos en defensa y el Zaragoza se volvió a ir a siete puntos (37-44), obligando a Vázquez a parar el juego con tiempo muerto. Una canasta de Silva sobre la bocina acercaba a cuatro la desventaja del Bembibre. En el último cuarto, el acoso al aro del Zaragoza era una constante y a base de bajarse a las trincheras, igualó a puntos en el minuto 37 (55-55) y otra vez a 62, en el siguiente ataque, el Pajariel se puso por delante a falta de 81 segundos para el final, 64-62.
Rugió como nunca el Bembibre Arena, haciendo fallar a Laura Nicholls uno de sus dos tiros libres y el equipo acertó en su ataque yéndose a tres de margen, finalizando con un mal triple del Casademont Zaragoza y haciéndose con el balón, como no, una enorme Roselis Silva. Final de infarto en el que la clave de la victoria, fue la expulsión por faltas de Gatling a falta de dos minutos para acabar el partido y el enorme acierto desde los tiros libres, anotando 18 de 22 intentos.