Tres vías para soñar Pobladura

Desconectar del mundo, aunque sea por un rato y más en tiempos de pandemia. Esa es una de las principales razones que le dan aún más valor a la red de rutas que desde el pasado verano ‘han vuelto a la vida’ en Pobladura de la Sierra. Tres propuestas aptas para todos los públicos, todas ellas señalizadas, que incluso pueden recorrerse en bicicleta y donde el paseante se encontrará no solo con los tesoros naturales que esconde la maragatería sino también con una fauna autóctona en la que se encuentran animales como el jabalí, ciervo, corzo, zorro, gato montés, tejón, las aves rapaces, aves de río y últimamente algunos lobos, tal y como recuerdan desde la Junta Vecinal de la localidad leonesa, impulsores principales de este proyecto.

El Cerro de Becerril, los Confines y el Mayuelo se han convertido en uno de los principales reclamos turísticos de esta localidad integrada en el municipio de Lucillo. Cada una de ellas transcurre por singulares parajes, comparten ADN pero sin embargo son únicas. La del cerro, por ejemplo, asciende hasta el punto más alto de los montes que rodean Pobladura. Desde allí se divisa gran parte de la Maragatería y del Bierzo en una estampa impresionante. Por su parte, los Confines -que es una senda circular- van cresteando los límites de Pobladura de la Sierra y de la Maragatería. A un lado se encuentran vistas a la parte alta del valle del Duerna y al otro hacia el Morredero. Finalmente, el Mayuelo transcurre paralela al río Duerna en sus primeros kilómetros, va ascendiendo suavemente, ofrece «bonitas vistas del fondo del valle y es una ruta en la que nos cruzamos con saltos y manantiales de agua», recuerda Javier Panizo, presidente de la Junta vecinal de Pobladura de la Sierra.

En una realidad actual donde apenas se puede disfrutar de actividades de ocio cobran cada vez más importancia este tipo de iniciativas al aire libre. De hecho a estas tres rutas se sumarán otras cuatro a lo largo de 2021 que completarán un catálogo diverso y lleno de oportunidades. Todas ellas balizadas y totalmente señalizadas. «La empresa que nos asesoró y se ha encargado de todo el diseño es La Tierra del Roble», subraya Panizo.

El Cerro de Becerril parte de la ermita de Nuestra Señora de las Nieves ascendiendo levemente al cerro, desde donde aparece un referente como es el famoso Monte Teleno. «El itinerario, a pesar de que mantiene una progresiva ascensión es cómodo, debido al buen estado de la pista. Es una ruta fácil aunque se necesita una forma física media para ascender al Cerro Becerril, pues en sus últimos tramos nos enfrentamos a pendientes acusadas, pero sin ninguna dificultad técnica». En El Mayuelo «nos encontramos con diferentes sorpresas agradables como un manantial de aguas cristalinas o el acceso a una preciosa cascada entre los árboles». El Mayuelo se antoja como un lugar perfecto para comer y descansar junto a un manantial de agua cristalina. Finalmente, los Confines es una ruta circular con el Duerna como acompañante de lujo.