La Audiencia absuelve a Rato y su cúpula de la salida a Bolsa de Bankia
La operación contó con el aval del Banco de España, la CNMV, el Gobierno y la UE
José Antonio Moral Santín y Rato, en el banquillo. FERNANDO ALVARADO
El que fuera presidente de Bankia, Rodrigo Rato, ha quedado absuelto en la causa que juzgaba su responsabilidad penal en la salida a Bolsa de Bankia de 2011. La Audiencia Nacional le exime de los delitos de estafa a los inversores y falsedad contable por el que la Fiscalía pidió hasta ocho años y medio de prisión para el también exministro, en prisión por las ‘tarjetas black’. Junto a Rato han quedado libres de toda culpa los otros 33 acusados en el proceso desarrollado en la Audiencia Nacional, con una sentencia que apunta a los supervisores de la época como los órganos que permitieron una operación que acabó en fiasco para miles de pequeños ahorradores.
La resolución de la Sala de lo Penal de la Audiencia se ha hecho pública apenas una semana después de que Bankia anunciara su acuerdo de integración con CaixaBank, operación que se ha colado en los últimos días de elaboración del propio fallo, que exonera de cualquier responsabilidad penal a los directivos que en 2011 decidieron que la entidad que aglutinaba a las antiguas cajas de ahorros (Caja Madrid, Bancaja, Caja de Canarias, Caixa Laietana, Caja La Rioja, Caja Avila y Caja Segovia) debía dar el salto al mercado bursátil en plena crisis económica y financiera.
La sentencia dicta que aquella salida a Bolsa contó con la aprobación de todos los supervisores, como el Banco de España, cuyo gobernador era Miguel Angel Fernández Ordóñez, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), con Julio Segura al frente, el Gobierno, entonces presidido por José Luis Rodríguez Zapatero, a través del Frob (Fondo de Reestructuración Bancaria), e incluso las instituciones europeas por medio de la Autoridad Bancaria (EBA). La sala recuerda que la gestación de Bankia «fue impulsada por las autoridades económicas y financieras» y que estos organismos ejercieron una «fuerte presión» para conseguirlo, que la decisión de salir a Bolsa fue «enteramente contempladas» por el Banco de España y que el folleto de la operación contenía «amplia y certera» información financiera y no financiera. Además, apunta que durante el juicio solo se expusieron actitudes genéricas sobre los acusados y no actos concretos por los que se les pueda imputar delito penal.
Esta sentencia contrasta con la del Tribunal Supremo, cuyo fallo llegó a anular en 2016 esa salida a Bolsa ante «la grave inexactitud del folleto y el error padecido por los demandantes». Aunque era un proceso civil, y en este caso uno penal. A principios de 2016, el Alto Tribunal obligó a devolver a los pequeños accionistas las cantidades invertidas en la salida a Bolsa.
Rato continúa cumpliendo la condena que ya le impuso la Audiencia Nacional por las ‘tarjetas black’. Es el único de todos los acusados que se mantiene al 100% entre rejas. Tras su absolución por la salida a bolsa de Bankia, tiene vía libre para que le concedan la semilibertad, al haber superado más de un cuarto de la condena.
Sin embargo, a Rodrigo Rato aún le espera una macrocausa, iniciada en abril de 2015, por la que se le investiga por la presunta comisión de delitos contra Hacienda, blanqueo de capitales y corrupción en los negocios por las irregularidades que podría haber cometido a través de sus empresas.
La causa, que se se sigue en los juzgados de instrucción de Madrid, comenzó con una decena de piezas por fraude fiscal por 6,8 millones de euros de cuotas impagadas del IRPF entre 2004 y 2015. Llegó a ser detenido en su domicilio con las cámaras de televisión postradas en su casa. Aunque él considera Aunque él considera que son conclusiones «disparatadas» de los investigadores.