El covid hunde la economía un 10,8%, el mayor desplome desde la Guerra Civil
El cuarto trimestre de 2020 fue peor de lo previsto. Aunque las primeras estimaciones del INE apuntaban a un crecimiento de la economía del 0,4% y sorprendía a varios organismos económicos, ayer actualizó los datos con todos los indicadores del año y confirma que el PIB no avanzó nada en el último tramo del año (0,0%).
Pese a este revés, el verano (junio-septiembre) fue mejor de lo calculado inicialmente, y los datos del INE revelan que la economía avanzó un 17,1% en el tercer trimestre, siete décimas más. El primer trimestre tuvo un descenso superior al estimado inicialmente, del -5,4% en lugar del -5,3% y en el segundo —cuando se produjo el cierre total de la economía— el desplome se modera muy ligeramente al -17,8%, una décima menos de lo previsto. Todo ello hace que el INE haya actualizado su cálculo de PIB anual, que se queda finalmente en una caída igualmente histórica del -10,8%, dos décimas menos de lo previsto inicialmente en la Contabilidad Nacional.
Se trata del mayor desplome de la economía española desde la Guerra Civil. El mayor descenso anual del PIB en tiempos de paz se había registrado en 2009, en plena crisis financiera, pero el retroceso fue mucho menor, del -3,8%. El INE no registraba un descenso del PIB así de profundo desde el comienzo de la serie histórica en 1970.
La economía española estaba creciendo más que sus socios europeos desde la salida de la crisis. Su última contracción fue en 2013, cuando cayó un -1,4%, pero a partir de ese momento comenzó a avanzar, tocando su máximo en 2015 con un 3,8% de avance. En 2019 consiguió crecer un 2%, el doble que la media de la eurozona, y todos los organismos vaticinaban que en 2020 seguiría creciendo por encima de la media, aproximadamente un 1,5%. Pero llegó la crisis del coronavirus y todos los cálculos se fueron al traste. Ahora se considera que no podremos volver al nivel económico precrisis como mínimo en 2023, según las últimas estimaciones del Banco de España, que esta misma semana actualizó sus previsiones con una horquilla de crecimiento este año del 3,2% al 6%, empeorando sus previsiones de hace tres meses.
Desaparece, por el momento, el riesgo de recaída en recesión, un peligro sobre el que alertaba la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, vista la incidencia de la tercera ola en toda Europa tras las fiestas navideñas. Porque para el primer trimestre de 2021 se espera que el PIB caiga un 0,4% —datos del Banco de España—, pero el último tramo de 2020 se salvó de la caída. Decimos «recaída» porque España sufrió ya en 2020 una recesión técnica.