El miedo a la recesión arrastra a la Bolsa hasta su mayor caída en dos años

josé m. camarero | madrid

La acumulación de datos negativos y la constatación de realidades adversas para el crecimiento económico tumbaron este miércoles los mercados mundiales tras una espiral bajista que, en el caso de España, provocó que la Bolsa sufriera el mayor retroceso en un solo día de los dos últimos años. El Ibex-35 se dejó un 2,77% y cerró en los 8.912 puntos, abandonando así la barrera psicológica de los 9.000 puntos, algo que no ocurría desde principios de septiembre. De esta forma, ha reducido drásticamente las ganancias que venía acumulando a lo largo del año. A falta del último trimestre, el selectivo gana un 4,3%.

El optimismo predominante en las primeras horas de negociación del trimestre se esfumó después de que los inversores conocieran el dato de actividad manufacturera de Estados Unidos, en su nivel más bajo de la última década. Los mercados temen que la desaceleración actual derive en una recesión. Los efectos desconocidos del brexit suponen una de las causas de ese miedo. Además, por si fuera poco, el permiso de la Organización Mundial del Comercio (OMC) para que EE UU pueda imponer aranceles a la Unión Europea por hasta 7.500 millones de dólares lastró el cierre de todos los mercados europeos. Las pérdidas bursátiles fueron generalizadas en las plazas internacionales: el Dax alemán bajó un 2,76%; el CAC francés, un 3,12%; el MIB italiano, un 2,87% y el FTSE británico retrocedió un 3,23%. Por su parte, Wall Street se sumó al rojo y a media sesión los tres índices de referencia se dejaron cerca de un 2%.

En el caso español, la banca protagonizó algunos de los mayores retrocesos de la jornada, con caídas como las de Santander (-4,2%), BBVA (-3,8%), CaixaBank (-2,9%), Bankinter (-2,1%), Bankia (-1,8%) o Sabadell (-1,5%). También registraron fuertes pérdidas valores como ArcelorMittal (-5,9%) o Amadeus (-4,3%). Por su parte, Telefónica se dejó un 2,4% de su valor, Repsol un 2,3% e Iberdrola un 1,1%.