152 personas muertas en la carretera desde que comenzó la Navidad

Ciento cincuenta y dos personas han perdido la vida en las carreteras españolas desde que comenzó la operación especial de Tráfico con motivo de la Navidad el pasado viernes 19 de diciembre hasta las 20.00 horas de ayer, informó la Dirección General de Tráfico (DGT). Desde las 15.00 horas del pasado día 19 hasta las ocho de la tarde de hoy se han registrado 127 accidentes mortales, en los que además 65 personas han resultado heridas graves y 44 leves. En las últimas veinticuatro horas se han producido 7 accidentes mortales en los que han muerto 9 personas y 5 han resultado heridas graves y 4 leves, después de que ayer, día de Nochevieja, no se registrara ningún accidente mortal por primera vez en los últimos años. León vivió también una jornada tranquila sin accidentes y sin sucesos destacables durante las celebraciones de Nochevieja. Sin embargo, esta buena racha se truncó ayer con un grave accidente ocurrido sobre las 11.00 horas en el kilómetro 25 de la M-600, a la altura de la localidad madrileña de Valdemorillo, al colisionar dos vehículos frontalmente, un Mercedes y un Audi A3. Las tres víctimas mortales en el accidente de tráfico ocurrido en la carretera M-600, en el término municipal madrileño de Valdemorillo, al chocar frontalmente dos turismos, eran los padres y el hermano, respectivamente, de los dos niños de 4 y 6 años que resultaron heridos graves en el mismo. Un portavoz de la Guardia Civil de Tráfico informó a Efe de que el padre, J.M.C.L. de 43 años, y su esposa, I.M.P. de 41, viajaban en un Mercedes junto a sus tres hijos de 13, 6 y 4 años, cuando, por causas que aún se desconocen, sufrieron un choque frontal contra un Audi A3 conducido por C.L.P. de 26 años. También ayer un joven de 29 años, vecino de Porqueres (Girona), falleció en un accidente de tráfico en la C-15 a la altura de la localidad gerundense de Banyoles, al colisionar frontalmente con otro vehículo. En cuanto al estado de las carreteras españolas , a las 20.00 horas el tráfico era fluido en las principales vías, aunque la aparición de niebla provocaba retenciones en cinco kilómetros de la N-I a la altura de del puerto madrileño de Somosierra, además de dificultar la visibilidad en carreteras de Avila, Burgos, Cantabria, Ciudad Real, Granada, Huelva, Jaén, Lérida, Pontevedra, Salamanca y Segovia.