Diario de León

Las acusaciones cruzadas de corrupción catapultan a Borràs como líder ‘indepe’

La candidata de Junts niega ahora que quisiera atacar a Oriol Junqueras al afirmar que está condenado por corrupto

Laura Borràs ayer, en un acto de campaña de Junts para las elecciones del 14-F con un cartel de Puigdemont detrás. ENRIC FONTCUBERTA

Laura Borràs ayer, en un acto de campaña de Junts para las elecciones del 14-F con un cartel de Puigdemont detrás. ENRIC FONTCUBERTA

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Salvador Illa, con su salida del ministerio y su regreso a la política catalana, fue el protagonista del inicio de la campaña. Pero normalizada ya la novedad que suponía la presencia del exministro de Sanidad, los focos apuntan ahora hacia Laura Borràs, candidata de Junts, que no sólo ha eclipsado a su jefe de filas, Carles Puigdemont, sino que está en el centro de todas las polémicas.

La dirigente soberanista ha optado por la vieja máxima daliniana de que, bien o mal, lo importante es que hablen de uno. En una entrevista en ‘El País’ dijo que Oriol Junqueras fue condenado por corrupción, comparando su situación con el caso que le afecta a ella y que investiga el Tribunal Supremo. Unas palabras que han encendido los ánimos entre sus socios republicanos, que reclaman una rectificación.

Borràs, al ser preguntada si ve razonable que una candidata a la Generalitat esté investigada por presuntas irregularidades por haber adjudicado presuntamente a dedo concursos públicos, respondió: «Todos los últimos presidentes de la Generalitat han sido inhabilitados y tenemos un vicepresidente en prisión condenado por corrupción», en referencia a Junqueras, que está condenado por sedición y malversación. Desde el entorno de JxCat han pedido que no se saquen las cosas de contexto y que si Borràs comparaba su caso con el de los presos era para denunciar que el Estado siempre acusa «falsamente» a los independentistas.

Pere Aragonès exigió ayer que pida disculpas porque «nadie puede vincular el 1-O con la corrupción».

Borràs no tiene intención de dar marcha atrás y de hecho ayer insistió en que se han malinterpretado o incluso se han manipulado sus palabras, según Puigdemont. La número dos de las listas de JxCat negó que quisiera atacar a Junqueras, a quien considera «compañero de viaje» hacia la independencia, si no que lo que pretendía era denunciar un contexto, en el que la justicia española persigue a la «disidencia política».

Trinchera aliada

Desde las filas republicanas señalaron que pretender comparar el fraccionamiento de contratos para favorecer a un amigo con el uso de fondos públicos para hacer posible el 1-O (malversación por la que está condenado, entre otros, Junqueras) es «mezquino». Desde Junts, se felicitaron por que el enemigo a batir ahora en la campaña, también desde la «trinchera aliada», sea Borràs. Lo que demuestra, apuntaron, que JxCat ya ha superado a Esquerra Republicana en las encuestas y está haciendo bien las cosas.

Lo que sí rectificó Borràs fue su promesa de declarar la independencia si el secesionismo supera el 50% de los votos. La líder de Junts también está en el centro del debate porque no se sabe qué pasará si gana las elecciones del 14 de febrero en Cataluña.

La candidata de la CUP, Dolors Sabater, abrió fuego vetando su investidura. No se pude investir a alguien que está imputado por corrupción, dijo la anticapitalista. Su partido rectificó después, pero el aviso ahí quedó. Esquerra no llegó a tanto, pero también lo insinuó.

tracking