Diario de León

Luz verde

El error de un diputado del PP saca adelante la reforma laboral del Gobierno

Los dos representantes de la Unión del Pueblo Navarro rompen la disciplina de partido y votan contra la ley

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, después de que el pleno del Congreso de los Diputados votara a favor de la convalidación de la reforma laboral pactada por el Gobierno con los agentes sociales, ayer en Madrid. KIKO HUESCA

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, después de que el pleno del Congreso de los Diputados votara a favor de la convalidación de la reforma laboral pactada por el Gobierno con los agentes sociales, ayer en Madrid. KIKO HUESCA

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

El Gobierno ha sacado adelante en el Congreso la reforma laboral por un solo voto y gracias a un error técnico en el voto telemático de un diputado del PP. La votación ha sido muy ajustada, con 175 votos a favor y 174 en contra, y con resultado no esperado, ya que finalmente los dos diputados de UPN han decidido no acatar la disciplina de voto y votar en contra de la reforma laboral.

Esto habría dado un vuelco a la votación: el bloque del ‘no’ a la reforma habría alcanzado 175 votos, por los 174 de los partidarios por convalidarla. Sin embargo, un diputado del bloque de la derogación ha acabado votando a favor de la reforma.

Según ha informado tras la votación la portavoz del PP, Cuca Gamarra, se trata de su diputado extremeño Alberto Casero, que había pedido el voto telemáticamente. Según ha explicado, Casero ha votado a favor por un problema técnico y ha acudido al Pleno a votar presencialmente, pero ya no le han dejado.

Batet anunció la derogación

En un primer momento, al estallar los aplausos en la bancada ‘popular’, que junto con los diputados de Vox se han levantado a aplaudir, la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, ha llegado a anunciar que la reforma había sido derogada. Segundos más tarde, los servicios jurídicos de la Cámara le han aclarado que, realmente, los votos a favor eran más que los votos en contra, anunciando entonces la convalidación de la reforma, y provocando una reacción similar en las bancadas del PSOE y Unidas Podemos, que han acabado coreando «¡Sí, se puede!»

Para la convalidación, el Gobierno ha sumado los votos de PSOE, Unidas Podemos, Ciudadanos, PDeCAT, Más País-Equo, Compromís, Nueva Canarias, PRC, Nueva Canarias y Coalición Canaria. En contra han votado PP, Vox, Esquerra Republicana, PNV, EH-Bildu, la CUP, UPN, rompiendo la disciplina de voto, el BNG y Foro Asturias.

Los socios, en contra

ERC, PNV y EH-Bildu, socios de la coalición, no avalan la reforma y cargan contra el Ejecutivo

Asimismo, tal y como pretendía el Gobierno, el Congreso ha rechazado la tramitación de la reforma como proyecto de ley, impidiendo así posibles enmiendas. Este rechazo, exigido por la patronal —había avisado de que no aceptaría que se tocara «ni una coma»—, ha impedido la negociación de cambios que reclamaban socios como ERC y Bildu, que pedían llevar más lejos la reforma. Durante su defensa de la reforma, la vicepresidenta de Trabajo, Yolanda Díaz, ha lamentado las «rivalidades políticas» que, a su juicio, han impedido el respaldo al decreto ley, y ha defendido que «si una norma contiene avances, hay que votar a favor».

El portavoz de ERC en el Congreso, Gabriel Rufián, conversa con la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas. JUAN CARLOS HIDALGO

Su norma, ha asegurado, supone «un cambio de paradigma» a la «cultura de la precariedad», pues nunca antes en las reformas laborales aprobadas en España se habían puesto tantas limitaciones a la temporalidad y al trabajo precario. Asimismo, ha puesto en valor la «generosidad» de los sindicatos CCOO y UGT y las patronales Ceoe y Cepyme, a cuyos dirigentes ha agradecido personalmente el esfuerzo por pactar la reforma.

La alternativa, ha dicho a Díaz, era «confirmar para siempre» la reforma laboral de 2012 del PP, que «instituyó aquel nocivo mantra» del «mejor un trabajo de miseria que nada», llegando a asegurar que «la encrucijada» en la votación en el Congreso era su reforma o un aval de la reforma aprobada hace ya diez años

«Ha traicionado a los suyos»

Recurriendo al turno en contra, la portavoz del PP, Cuca Gamarra, ha dicho que la vicepresidenta parecía «insegura» y «nerviosa» porque «sabe que ha traicionado a los suyos» con la reforma laboral y ahora sus votantes la ven «al frente de la Troika». Además, ha avanzado que de llegar al Gobierno el PP abordará una nueva reforma con la llamada ‘mochila austriaca’, propuesta que los ‘populares’ han decidido impulsar a través de una proposición de ley en el Congreso. «Estoy muy contenta, soy hija de trabajadoras», ha replicado Díaz, que ha recogido el guante lanzado por el PP para asegurar que la reforma de 2012 «no está pensada para crear empleo», sino bajar salarios, y ha acusado al PP de querer subvencionar el despido de miles de trabajadores con su mochila austriaca.

ERC, PNV y EH-Bildu, socios habituales de la coalición, no han avalado la reforma y han cargado contra el Ejecutivo por impedir modificaciones. En el caso del PNV, su portavoz Aitor Esteban ha lamentado la «hipocresía» del presidente de la CEOE, Antonio Garamendi, desvelando que, en privado, sí reconoce que la prevalencia de convenios autonómicos no suponía ninguna ruptura de mercado. Reconociendo su gusto por el contenido de la reforma y su aprecio por los consensos, ha criticado que «los consensos no se imponen, menos en un Parlamento democrático», tachando de «chantaje intolerable» que la Ceoe impusiera que no se pudiera tocar «ni una coma», y criticando que el propio Pedro Sánchez se sumara a él.

El líder del PP, Pablo Casado, llega al pleno del Congreso de los Diputados seguido de su número dos, García Egea. KIKO HUESCA

Gabriel Rufián, portavoz de ERC, ha dicho que con la reforma PSOE y Unidas Podemos han «intentado estafar» a los trabajadores», pues cree que la reforma no pasa de ser «un retoque», y encima no permiten negociar cambios. «Esto no ha sido un proceso de negociación», ha dicho, sino «de presión».

Rufián ha criticado las renuncias del Gobierno para derogar aspectos de la reforma del PP, como el recorte de las indemnizaciones o el fin de los salarios de tramitación, y ha asegurado que la reforma que ha defendido Yolanda Díaz «es la reforma que hubiera aprobado Albert Rivera de presidente».

tracking