Feijóo escoge a Gamarra como su número dos para empezar a cerrar heridas en el PP
Los populares abren hoy su congreso en Sevilla para dar carpetazo a la etapa Casado y corregir su rumbo a la Moncloa
Alberto Núñez Feijóo sorprendió ayer a propios y extraños con el anuncio de que Cuca Gamarra será su secretaria general. El dirigente que desdeñó la política a golpe de tuit, utilizó la red Twitter para anunciar el nombre de su número dos. El PP encara la recta final de una crisis sin precedentes que abrió en canal el partido y se llevó por delante a su presidente Pablo Casado. Este sábado, Feijóo asumirá las riendas de la formación e inaugurará una nueva etapa con el cometido de «coser» heridas y, sobre todo, «aprender de los errores del pasado». Esa «voluntad integradora», como la denominan fuentes cercanas al líder gallego, quedará plasmada en el equipo que le acompañará y con el que espera enfilar el camino hacia la Moncloa. Un equipo del que, por el momento, tan sólo se conoce que Gamarra será su número dos, «una persona adecuada para el nuevo tiempo del Partido Popular», señaló ayer el propio Feijóo. La portavoz parlamentaria apoyó a Soraya Sáenz de Santamaría en 2018, y Casado la recuperó para su equipo.
El todavía presidente de la Xunta confió en ella como la persona encargada de dar voz al partido durante el periodo de transición, en el que ha mantenido diversos cara a cara de alto voltaje con Pedro Sánchez, y ahora apuesta por ella como su mano derecha. «Le pido que asuma una nueva responsabilidad sirviendo también a su partido», escribió el barón gallego en las redes sociales. Un anuncio sorpresa a mediodía con el que Feijóo quiso evitar que el foco en el cónclave esté puesto durante los próximo días en esa decisión y no en los mensajes que deben de salir de él.
Poco antes el gallego había levantado el teléfono para comunicarle a Gamarra su decisión, quien agradeció desde el Congreso su confianza. «Soy una mujer de partido, siempre disponible para aquellas labores en las que pueda ser útil y me necesite mi partido», esgrimió la exalcadesa de Logroño tras conocerse su nombramiento. Dijo sentirse «ilusionada», pero al mismo tiempo ser «muy consciente» de la responsabilidad depositada en ella, que exige «estar a la altura de las circunstancias». De perfil moderado y «muy trabajadora», Gamarra cumple con la máxima del líder gallego de rodearse de perfiles de gestión y con experiencia. Durante estas semanas ha sido la interlocutora del Gobierno en todo lo referido a la guerra de Ucrania o las medidas anticrisis aprobadas este martes por el Consejo de Ministros. Su nombramiento «es un acierto», aseguró el portavoz del PP en el Senado, Javier Maroto. Cuya continuidad está en el aire y gana enteros como relevo el nombre de Fernando Martínez Maillo, vicesecretario de Organización con Mariano Rajoy. Quinielas El nombre de la riojana sonaba en algunas quinielas para el cargo junto al de Esteban González Pons o el de Fátima Báñez. El eurodiputado, uno de los hombres de máxima confianza de Feijóo y en quien pensó el gallego para ocupar la secretaría general cuando estuvo a punto de dar el paso hace cuatro años, tendrá con total seguridad un puesto en el nuevo organigrama directivo del partido, que aún se está terminando de perfilar. Un cargo, en todo caso, que permitirá a González Pons seguir en Bruselas, que era uno de sus deseos.
Portavoz en la UE
En el partido dan por hecho, además, que será el nuevo portavoz del Grupo Popular en el Parlamento Europeo en sustitución de Dolors Monserrat, en un momento clave por el reparto de los fondos europeos de reconstrucción. También se da por descontado que Báñez, que fue titular de Empleo y Seguridad Social con Mariano Rajoy y que ahora preside la Fundación CEOE, tendrá un papel destacado en esta nueva etapa aunque a la sombra, como asesora. Para esto se ha creado la Oficina del Presidente, un órgano externo a la estructura orgánica del PP en el que tendrán cabida además de empresarios y miembros de la sociedad civil, exdirigentes que se fueron a la actividad privada.
El nombramiento de Gamarra abre una incógnita sobre su relevo en la portavocía en el Congreso, donde ya empiezan a sonar con fuerza como sustitutos Carlos Rojas, de la máxima confianza del presidente andaluz Juanma Moreno.