El PP quiso restar importancia a las medidas anunciadas este martes por el Gobierno para incentivar el alquiler de viviendas, al considerarla «parciales» por estar dirigidas sólo a una parte de los jóvenes. Su portavoz parlamentario, Eduardo Zaplana, consideró, asimismo, que revelan una situación de «cierta angustia electoral» en el PSOE, que le lleva «a estar todos los días buscando golpes de efecto». De forma irónica, el líder de los populares, Mariano Rajoy, dijo que «no está mal después de tres años y medio» tras la creación por parte del presidente José Luis Rodríguez Zapatero del Ministerio de Vivienda. También los sindicatos reclamaron mayores ayudas para quienes vivan en régimen de arrendamiento. El secretario general de CC.OO., José María Fidalgo, mostró su apoyo a todas las medidas
. Su homólogo en UGT, Cándido Méndez, destacó a su vez que las medidas del Gobierno
, al tiempo que pidió que se potencia la Sociedad Pública de Alquiler. Frente al respaldo de las centrales sindicales, en el plano político sí se escucharon criticas, por ejemplo, en el caso de CiU. Los nacionalistas catalanes lamentaron que las medidas anunciadas por Rodríguez Zapatero adolezcan de «falta de rigor y seriedad», lo que en su opinión denota «una sobredosis de electoralismo», al tiempo que previnieron sobre su carácter «precipitado» al existir la posibilidad de que «produzcan un incremento de las desigualdades». Rajoy aprovechó la ocasión para señalar discrepancias en el seno del Gobierno socialista y dijo que el vicepresidente económico, Pedro Solbes, «dijo una cosa y se ha hecho otra», en relación al coste de las medidas que incentivarán el alquiler de vivienda.