Torra busca el bloqueo institucional en Cataluña si el TS lo inhabilita

Quim Torra quiere morir matando. El líder independentista ha avanzado ayer su estrategia a corto plazo marcada por el previsible final de su carrera política. El próximo 17 de septiembre el Tribunal Supremo tiene previsto revisar el recurso de casación contra la sentencia condenatoria que le impuso el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña.

Este órgano le inhabilitó a un año y medio para el ejercicio de empleo o cargo público por un delito de desobediencia. Se negó de forma reiterada a cumplir los órdenes de la Junta Electoral para retirar los lazos amarillos de edificios de la Generalitat. Un símbolo en favor del proceso secesionista y de los «presos políticos».

Con estos precedentes, y a la espera de la sentencia firme del Supremo en otoño próximo que le deje fuera de juego, Torra ha marcado las cartas de la partida. En una entrevista en la televisión pública TV3, ha pedido a los partidos independentistas que no presenten otro candidato en el Parlament para investir a otro presidente si es inhabilitado: «No se entendería que algún partido independentista presentara otro candidato», ha dicho, en referencia sobre todo a los planes que tenga ERC, su socio de coalición.