UP trata de reponer el escaño de Alberto Rodríguez entre tensiones
El diputado inhabilitado por el Supremo acusa al partido de ejercer «presiones» y «atacarle»
La ministra Ione Belarra se ha dirigido en varias ocasiones a la Junta Electoral Central. EMILIO NARANJO
Desde que la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, retirara el acta de diputado a Alberto Rodríguez tras ser condenado a 45 días de inhabilitación por el Tribunal Supremo, Unidas Podemos juega con uno menos en cada votación (34 votos en vez de 35). Tras constatar lo delicado de la situación en la convalidación de la reforma laboral —que salió adelante gracias al error de un parlamentario del PP— cada vez son más dirigentes de las confluencias moradas los que piden que se releve el puesto.
Este viernes alzaron la voz el ministro de Consumo, Alberto Garzón, y el secretario de Estado para la Agenda 2030, Enrique Santiago, ambos pertenecientes a Izquierda Unida. Garzón reconoció que es «fundamental» sustituir a Rodríguez pese a que reconoce que la decisión de Batet fue «una injusticia», términos compartidos por Santiago. Sin embargo, la situación ha derivado en tensiones internas entre las confluencias que forman Unidas Podemos. El propio Rodríguez ha acusado a las estructuras del partido de ejercer «presiones» y «atacarle», algo que ha calificado de «gravísimo». El ex diputado morado deslizó en la red social Twicht que existe una «estrategia continuada» para «culpabilizarle», «revictimizarle» y «responsabilizarle» de esta situación mientras el partido, añade, opta por «pasar página y seguir tejiendo acuerdos con el PSOE».
La formación de Ione Belarra, quién llegó a acusar a Batet de «prevaricación», se ha dirigido en varias ocasiones a la Junta Electoral Central, de la que depende la reposición del acta en otra persona, para tratar este asunto. Sin embargo, el órgano explica que no ha recibido una respuesta firmada ante notario de Patricia Mesa, la tercera en la lista electoral de la circunscripción de Tenerife (que encabezaba Rodríguez) y a quien le correspondería el escaño tras la renuncia a entrar en el Congreso de la número dos en la candidatura. Ahora «depende de ella aceptarla o renunciar», responden a los morados. Todo ello mientras en Podemos Canarias la baja de su diputado se sigue viviendo como un duelo.