Von der Leyen ensalza la reforma a días de la votación en el Congreso
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, insufló ayer algo de aliento a un Gobierno sometido a la presión incesante del primer partido de la oposición y cuestionado por sus principales socios. Von der Layen, que pertenece a la misma familia política que el PP, remitió una carta a Pedro Sánchez el pasado 25 de enero, pero cuyo contenido no había trascendido aún, en la que, entre otras cosas, felicita a España por haber sido el primer Estado de la Unión Europea en recibir un desembolso del mecanismo de recuperación y resiliencia tras el «cumplimiento satisfactorio» de los 52 hitos de su Plan de Recuperación.
A poco más de 48 horas para que el Congreso de los Diputados decida si convalida o deroga el texto pactado por el Gobierno con los agentes sociales, y con los números para la votación aún en el aire, la misiva sirvió también para poner encima de la mesa la importancia que la Comisión concede a las reformas estructurales comprometidas por España a cambio de los fondos europeos y en concreto su apreciación sobre la pactada con sindicatos y patronal, de la que hace una mención expresa.
La presidenta del Ejecutivo europeo valora, así, en el breve texto de apenas medio folio, que España siga haciendo «progresos» en ese ámbito. También agradece que España haya entregado ya su «primer informe» sobre la implementación del Plan de Recuperación y Resiliencia, incluido, dice «el propósito de transparencia y rendición de cuentas».
La Comisión no ha tenido aún tiempo para analizar ese trabajo y, no en vano, Von der Leyen se limita a afirmar que lo estudiará «con atención», pero el Ejecutivo aprovechó la ocasión para reivindicarse y, sobre todo, censurar a Pablo Casado por cuestionar los criterios del Gobierno para repartir las ayudas y negarse a avalar el acuerdo alcanzado con los sindicatos y la CEOE.
El líder de la oposición defendió su posición y adujo que es su obligación exigir transparencia en la utilización de los fondos entregados por Europa para evitar que el Ejecutivo meta «la mano en el bolsillo de todo los españoles».