Alberto Garzón, ‘A pie de escaño’

alicia lópez

Cuando Podemos dio el salto a la política, el candidato de IU a la Presidencia del Gobierno, Alberto Garzón, pensó que el partido de Pablo Iglesias podía ayudar a «refundar» IU y la izquierda en todo el país. Igual Garzón ya no piensa lo mismo después de que Iglesias le diera el portazo definitivo la semana pasada a su propuesta de unir fuerzas en una candidatura para las generales, pero es lo que se le pasó por la cabeza en aquel momento, de la misma manera que, pasado el tiempo, reconoce que infravaloró las posibilidades del entonces «brillante asesor» de IU. Estas son algunas de las reflexiones que recoge en A pie de escaño , un libro que presentará el martes que viene, coincidiendo con la última semana de esta legislatura. Una legislatura la décima que él encaró siendo un diputado completamente desconocido y que, sin embargo, cierra como candidato de IU a presidir el Gobierno. Y como militante de IU recuerda en el libro que ha sido muy crítico con su organización, de la que piensa que tiene una estructura «con una rigidez y dinámica propias de un partido tradicional», motivo por el que no ha sido capaz de atraer a personas «altamente capacitadas» que están fuera de la formación. Insiste Garzón en apostar por la unidad popular aunque admite que esto es «extraordinariamente complicado» tal y como están configurados los partidos, y recalca también que lo importante es aglutinar a la gente en torno a un proyecto «y no la bandera que llevamos».