El genocidio negado por Ankara

El genocidio armenio le costó la vida en 1915 a entre 1 y 1,5 millones de personas de esta etnia, algo que la Turquía oficial niega hasta hoy. Durante la Primera Guerra Mundial, las tropas otomanas luchaban contra los rusos en el este de Turquía, donde numerosos armenios participaron en grupos partisanos para ayudar a los rusos, que apoyaban su causa. Las autoridades otomanas iniciaron la expulsión masiva de armenios con el argumento de que éstos podrían ayudar a las tropas invasoras rusas. En las marchas hacia la vecina Siria y Mesopotamia (hoy Irak) murieron hasta 1,5 millones de personas como consecuencia de matanzas, el hambre y cansancio. La Turquía oficial se niega a calificar lo sucedido como «genocidio» y asegura que el Ejército otomano nunca dio la orden de asesinar en masa al pueblo armenio, y dice que no más de 500.000 personas fallecieron entonces. Documentos históricos demuestran que las principales capitales de Europa y también el Gobierno de Estados Unidos estaban informadas sobre la masacre. Y en agosto de 1939 el dictador Adolf Hitler se preguntó en relación con el planeado exterminio de los judíos: «¿Quién habla hoy del exterminio de los armenios?».