Diario de León

Trump anuncia una larga batalla judicial

Celebración de la victoria de Biden en Nueva York. ALBA VIGARAY

Celebración de la victoria de Biden en Nueva York. ALBA VIGARAY

Publicado por
León

Creado:

Actualizado:

Al aún presidente de los Estados Unidos el final del recuento electoral le pilló jugando al golf en el club de campo que tiene en Sterling (Virginia). Es dudoso que recibiera grandes dosis de apoyo porque se trata de un estado que no estuvo de su parte cuando tocó el cielo en 2016 y que tampoco lo ha estado ahora. Aunque no parece que Donald Trump necesite demasiado consuelo porque reaccionó asegurando que las elecciones norteamericanas están «lejos de haber terminado», y prometió una feroz batalla judicial tras volver a extender las dudas sobre la legitimidad del proceso electoral estadounidense sin, nuevamente, presentar prueba alguna.

Apenas unas horas antes de que se hiciera oficial el triunfo demócrata, Trump había vuelto a poner en jaque a los verificadores de Twitter autoproclamándose vencedor de los comicios «por mucho». No ha sido así, pero el candidato republicano tampoco reconoció la derrota ni hizo la llamada de cortesía para felicitar a Joe Biden. Un gesto tácito que viene cerrando la contienda electoral norteamericana desde hace décadas. Ocurrió así hasta en las luchas más encarnizadas: la que mantuvo Nixon con Kennedy o, más recientemente, la de Al Gore con Bush. Pero Trump parece dispuesto a romper la tradición y a no facilitar un traspaso de poderes modélico. Abandonará la Casa Blanca en enero, pero va a ser plantando batalla más allá de las urnas. Una estrategia que, en todo caso, no pilla a nadie por sorpresa porque el líder republicano la viene anunciando desde que el martes se abrieran los centros de votación. Trump ha sembrado el camino con la habitual retórica incendiaria que ha marcado su mandato.

La estrategia
El líder republicano acusa a Biden de autoproclamarse vencedor «falsamente»

La oficina de prensa del aún presidente estadounidense emitió este sábado un comunicado en el que no reconocía la victoria de Biden. El texto aseguraba que el candidato demócrata se había «apresurado» a levantar los brazos y reclamar «falsamente» el triunfo cuando, según el líder republicano, el recuento de papeletas debe ser revisado aún en profundidad. «Los votos legales son los que deciden, no los medios de comunicación», insistió Trump, que también va a mantener su enfrentamiento con las principales empresas periodísticas del país hasta el final.

El comunicado de Trump asegura que la reclamación va a ser inmediata. «Las demandas acaban de empezar», auguró el viernes. Este sábado insistió en ello y puso plazos. «Empezaremos a defendernos en los tribunales a partir del lunes», aseguraba el comunicado. El objetivo del presidente en funciones: «Asegurar que las leyes electorales son completamente cumplidas y el ganador apropiado es proclamado».

Quiere volver a ser candidato

Trump y su equipo no van a cejar pese a que los primeros recursos, presentados cuando aún se estaba realizando el recuento en algunos estados, no han prosperado. En el momento en el que empezaba a quedar claro qué regiones iban a ser clave para decantar la balanza, los demócratas pusieron en duda el recuento en Arizona, Míchigan, Wisconsin, Georgia, Nevada y Pensilvania. «Paren de contar», lanzó Trump a través de las redes sociales justo en ese mismo momento, para denunciar irregularidades y «fraude» en el voto por correo que, decía, le iba a arrebatar victorias cantadas con la aparición de votos supuestamente no justificables.

El equipo jurídico republicano ha puesto en duda todos los recuentos en los que Biden se ha impuesto por entre 0,5 y 1 punto de diferencia. Pero la realidad es que ningún recurso ha logrado por el momento voltear el recuento a favor de Trump.

«No descansaré hasta que el pueblo americano tenga el recuento que se merece», insistió ayer Trump tras la victoria de Biden. El líder republicano apelará ahora a la Corte Suprema, en la que los jueces conservadores tienen mayoría. Tres de los seis han sido incluso nombrados por el propio Trump durante su mandato, pero nada de eso garantiza que el recuento pudiera sufrir un vuelco. Principalmente, porque no están claras las irregularidades que reclaman los republicanos y tampoco han puesto sobre la mesa indicios de fraude reales.

La siguiente duda es si Trump aceptaría un fallo judicial desfavorable que debería suponer el final del camino... o no. Fuentes cercanas al presidente aseguran que ya empieza a prepararse para volver a aspirar a la presidencia en 2024.

tracking