«A mí el ruido me ha llegado a echar de mi casa»

Aunque la declaración ZAS en el Húmedo ha hecho que se reduzca de forma considerable, el ruido todavía es una de las principales molestias para algunos habitantes de la zona, como confirma la portavoz de la asociación León Típico, Pilar Castañón, quien insiste en que «han echado a la mayoría de los vecinos y los que quedan son tan pocos que ni denuncian». «A mí el ruido me ha llegado a echar de mi casa», recalca, tras citar que después de años de quejas ha terminado por alquilar su piso de la calle Ramiro III para trasladarse justo a una de las vías que divide el casco histórico y el Ejido. «Entre los locales nocturnos, las charangas de las fiestas y las despedidas de soltero y las obras que estuvieron haciendo en el bar que tiraron en la Plaza de San Martín terminé por marcharme», repite, aunque no desiste de sus reivindicaciones ante el consistorio. «Tienen que revisar las licencias son para poner vinos y terminan por poner copas», explica la representante vecinal.