Ábalos deja a mitad de camino su visita a León

La deseada visita de José Luis Ábalos a León acabó diluida; sobre la marcha. El ministro se quedó a mitad de camino, de la provincia leonesa y de completar la agenda vespertina que tenía preparada como secretario de organización federal socialista. Cumplió con la cita en Valladolid, para bendecir la toma de posesión de Javier Izquierdo en la Delegación del Gobierno en la autonomía; pero dejó en ascuas a los cargos y militantes socialistas leoneses, con los que se iba a celebrar un encuentro en Mansilla Mayor a las ocho de la tarde. «Por problemas de agenda», se excusó el PSOE leonés en una nota de prensa a primera hora de la mañana, para deshacer la convocatoria que medio día antes había anunciado como «prueba de compromiso» del hombre fuerte del socialismo y del Gobierno con la provincia leonesa. En mitad de los focos por el affaire que protagonizó en el aeropuerto de Barajas con la vicepresidenta de la dictadura venezolana, a Ábalos le esperaba León con la ansiedad que provoca la urgencia por tanto proyecto colgado de la incertidumbre, y que engrosa la lista de su cartera ministerial, desde ahora bajo el epígrafe de Transportes, Agenda Urbana y Movilidad. La presencia de Ábalos en la provincia leonesa, además de por su desempeño orgánico en el PSOE, fiador principal del acuerdo de gobierno PSOE-UPL en la Diputación de León, daba pie para hablar de la obra de integración del tren de Feve y de alta velocidad en la capital, la estación pasante, la adjudicación del CRC, la segunda fase de las obras del hostal San Marcos, el respaldo a proyectos que acompañen la expansión del corredor Atlántico de mercancías hacia el noroeste desde León; y esa plataforma intermodal de Torneros, soporte elemental que ha de sujetar el modelo de desarrollo social y económico que pretende León, en plena encrucijada.

El vacío que dejó en las expectativas de la agenda política leonesa motivó críticas; la UPL interpreta la cancelación del viaje como una falta de respeto a los leoneses, y deja claro que «al ministro le interesa poco León». Eduardo López Sendino, vicesecretario del partido, se preguntó ayer qué razón de peso le hizo mantener la cita en Valladolid y anular el viaje a León «que, por otra parte, no necesita que un ministro se pasee por la provincia para que se plasmen las inversiones; que el discurso de Cendón, sobre que a León le va bien con el PSOE, no se quede en vanas palabras». Ajeno a todas estas inquietudes, Ábalos proclamó desde Valladolid que Castilla y León no puede ser un lugar de paso entre la capital de la nación y la periferia del norte, y defendió una política que integre y cohesione a las nueve provincias de la autonomía. El PSOE leonés mantiene que habrá otra ocasión.