La agenda inicial de una treintena de eventos rota por la pandemia
El Palacio de Exposiciones de León dispone de diez mil metros cuadrados, que emergen como superficie promocional de vanguardia en esa marca que la ciudad aspira a consolidar como reclamo de congreso.
Hay un pronóstico en esa carrera que acabó hecho añicos por la expansión de la pandemia y las medidas correctoras, que agotaron la agenda prevista de una treintena de eventos de diferente calado y duración, previstos con agenda de celebración antes de que el coronavirus cambiara la percepción y el orden de preferencia social. Después del cribado del confinamiento que en los meses de primavera dejó a cero la actividad social, comercial u otra de cualquier tipo económico, cinco de esos eventos se mantienen en estado de aplazamiento, uno de ellos en disposición de celebrarse, en el mes de septiembre. La mayor parte d e los eventos expositores previstos en León proceden del sector de la investigación, del área educativa y docente y de los de respuesta comercial y la tecnología, uno de los de mayor capacidad de convocatoria. Casi un tercio de ellos aportarían asistentes procedentes del extranjero.
El aforo que se limita al medio millar de asistentes presenciales a estas citas de congresos va a condicionar de alguna forma los plazos de consolidación de la ciudad como referencia para el sector.