El turno del padrón de la ITC hace que a lo largo de este año y hasta el 1 de febrero de 2016 tengan que pasar la inspección 1.033 inmuebles del municipio: aquellos construidos en 1974 y entre el 1 de enero de 1956 y el 31 de diciembre de 1960. El listado representa una de las mayores remesas anuales que se han registrado hasta ahora. La ordenanza, puesta en marcha en 2009, ya suma más de 4.400 edificaciones que superan los 40 años de antigüedad y que han certificado sus condiciones de «seguridad y salubridad», como consta en la normativa municipal, que fija para 2017 la revisión total de los alrededor de 7.500 casas que hay en León; a partir de ese año no se frenará el proceso, dado que existe la obligación de tener que revalidar la inspección cada diez años desde la primera vez. La ITC tiene que llevar el sello de un profesional acreditado y su coste depende de las careterísticas del edificio, aunque se calcula que de media supone 150 euros de gasto por cada vivienda.
