La autopista de León a Asturias perdió el año pasado 1.312 vehículos diarios
Aucalsa acentúa la crisis y suma ya cinco años consecutivos de caída de usuarios.
Puente sobre el pantano de Luna, símbolo de la construcción de la autopista del Luna.
La AP-66, la autopista de León a Asturias, ha visto cómo se desploma el número de usuarios hasta contabilizar 1.312 vehículos menos cada día el año pasado. Según los datos que publicó ayer La Nueva España, esta infraestructura de alta capacidad tuvo en 2012 una media de 7.971 desplazamientos diarios, lo que supone 478.880 viajes menos que en 2011, un 9% de recorte.
El mal dato se suma ya a una caída de usuarios que parece no tener fin, ya que cumple cinco años consecutivos con menos viajeros, si bien 2012 pone en evidencia que el número de conductores que evitan el peaje se ha disparado. Entre 2007 y 2011, los cuatro primeros años del actual declive, la AP-66 registró una pérdida global de 1.004 usuarios al día. Sólo en 2012 se contabilizaron 1.312 desplazamientos menos.
Aucalsa ya advirtió el pasado año que a finales de 2011 la caída del tráfico se había acentuado. Esta tendencia se ha mantenido durante todo 2012, empujando a la autopista hasta cifras de usuarios similares a las del 2002. El descenso se concentró principalmente en los turismos, con un recuento que cayó por primera vez, desde 2003, por debajo de los 7.000 usuarios. El número de vehículos ligeros se situó el pasado año en 6.746 diarios, por los 7.867 contabilizados en 2011 y los 8.126 que se alcanzaron en 2010. En este apartado el máximo histórico se alcanzó en 2007, cuando se contabilizaron 8.632 usuarios. Los vehículos pesados que el año pasado transitaron por Luna fueron 1.225, por los 1.417 del ejercicio anterior, según el informe que recoge el rotativo asturiano. Aucalsa no es la única autopista que pierde usuarios. Desde que empezó la crisis, según el Ministerio de Fomento, es del 27 por ciento en el conjunto de las autopistas.
En el caso de la doble calzada astur-leonesa la intensidad media diaria de la circulación ha caído un 23 por ciento durante el último lustro. Entre las autopistas con más problemas se encuentra la Madrid-Guadalajara, cuya intensidad media diaria se hundió un 22 por ciento.