Las basuras amenazan con amargar la Navidad a toda la provincia con un paro desde el día 21
Los trabajadores de la UTE Legio VII registraron 18 días de huelga con posibilidad de ser indefinida a partir del 7 de enero
Las Navidades no se auguran dulces. Los trabajadores del Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) de San Román de la Vega y las plantas de transferencia vuelven a estar llamados a la huelga. El Comité de Empresa de la UTE Legio VII dio ayer un paso más en la amenaza que empezó a difundir tras el verano y registró en la Oficina territorial de Trabajo un paro de al menos 18 días que coincide de pleno con las fiestas navideñas, ya que arranca el día 21 a las siete de la mañana y se prolongaría hasta el 7 de enero, según el documento, que incluye el matiz de que la huelga podría convertirse en indefinida a partir de esa fecha.
La negociación para frenar esta medida, que llenará de basura las calles de los ayuntamientos de la provincia y augura amargar las Navidades, quedó el pasado miércoles de nuevo en un callejón sin salida. La junta directiva del Consocio de Residuos Sólidos Urbanos de León (Gersul) intentó zanjarlo dando luz verde a una revisión del canon concesional de 1,6 millones de euros desde 2013 hasta 2021 y a 2,43 millones del aumento de salarios a los trabajadores.
Pero la UTE formada por Urbaser y FCC reclama 5,8 millones en total y el pago a los operarios depende de ella, con lo cual las partes siguen divididas por una diferencia económica de 1,4 millones.
Gersul afirmaba cumplir con el compromiso adquirido con la empresa y los trabajadores, partes a las que corresponde ahora firmar el nuevo convenio. Su presidente y diputado provincial de Hacienda, Santiago Dorado, consideró que esos dos acuerdos debían contribuir a desconvocar la huelga y que la diferencia, de 1,4 millones respecto a los 5,8 que solicita la empresa «trasciende de lo contemplado en el contrato».
La autorización de ese gasto de 2,2 millones «supone la asunción íntegra, por parte del Consorcio, del coste de la subida salarial de los trabajadores que el nuevo convenio tendría para la UTE Legio VII», insistió, de modo que opina que la empresa «se queda así sin argumento para culpabilizar a Gersul de la firma de ese nuevo convenio». Dorado entiende que la empresa debería convocar a sus trabajadores y firmar el convenio para proceder a la subida salarial. «De lo contrario, estaría poniendo de manifiesto que está utilizando a sus trabajadores y la presión social de la huelga para tratar de sacar un beneficio al que no le da derecho el contrato que tiene con el Consorcio de Gersul», sostuvo.
Un anuncio que no ha conseguido evitar la convocatoria oficial de la tan anunciada huelga, El sindicato USO, que ha llevado el peso de las negociaciones con Gersul (participada principalmente por la Diputación), adopta la medida del paro en nombre de los 170 trabajadores al echar en falta todavía el dinero equivalente a los cuatro puestos de trabajo que quieren eliminar desde 2013, las horas extras y las vacaciones de los temporales que ya ha asumido la empresa.
«fracaso» de las negociaciones
Los trabajadores insisten en su escrito ante Trabajo que la huelga se convoca «ante el fracaso de todas las gestiones habidas para resolver dialogadamente el conflicto, incluida la mediación del Serla». Y especifican que la finalidad de la vía del conflicto «es que se firme el convenio colectivo y se aplique la revisión salarial pactada» el pasado 8 de abril y que conllevó un preacuerdo en septiembre.
El comité de huelga está integrado por doce trabajadores del servicio de basuras, entre ellos, el portavoz de USO, Fernando Abella. Todos ellos manifiestan que su deseo «es abrir todo tipo de negociaciones y mediaciones encaminadas a la solución del conflicto».