Diario de León

Un chófer del Alsa se salva de que lo aplaste un chopo

El árbol se desgajó de repente y cortó durante la tarde la avenida Sáenz de Miera

Los bomberos tuvieron que trocearlo para despejar la vía. Á. C.

Los bomberos tuvieron que trocearlo para despejar la vía. Á. C.

León

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El viento mostró ayer su fuerza en León con un despliegue de daños que a punto estuvo de costarle la vida al chófer del Alsa que salía a primera hora de la tarde desde la capital leonesa hacia Madrid. Cuando se dirigía a la estación, después de haber dejado aparcado su coche a la vera del Bernesga, el conductor, que se dirigía a pie hacia la entrada de la terminal, se salvó por el aviso del estruendo que provocó uno de los chopos que escoltan la valla de la piscinas municipales al desgajarse de la tierra. El crujido hizo que levantara la vista del móvil y viera cómo se le venía encima el árbol, que terminó cruzado de un lado a otro de la avenida Sáenz de Miera, con las lunas y el techo de un Audi A3 hechos añicos y daños en la carrocería de un Suzuki que había delante.

El suceso, que se produjo alrededor de las 16.15 horas, obligó a cortar el tráfico de la avenida y tener que desviar todas las circulaciones por las avenidas de Palencia y Doctor Fleming para poder hacer las maniobras de entrada y salida de los autobuses desde la estación. Desde ahí partió el Alsa hacia Madrid con Jesús al volante. «He oído un ruido y, al mirar para arriba porque iba con el móvil, he visto que se me venía encima. He tirado para adelante y he librado. El árbol se ha desplomado en el suelo en menos de cinco segundos», explicó el chófer de la compañía, mientras sus compañeros y la trabajadora del surtidor de gasolina de las inmediaciones se acercaban para ver si se encontraba bien.

Las grandes dimensiones del chopo motivaron la intervención de los bomberos. Con la ayuda de motosierras, los profesionales trocearon lo trocearon y despejaron la calzada para que se restableciera la circulación.

No fue la única intervención que anotaron los bomberos de León. Después de que se hubieran cerrado los parques ya a media mañana por precaución, otro árbol se cayó a la entrada de La Candamia. En la ronda de repaso por la ciudad, los profesionales retiraron durante la tarde además cristales dañados en algunas fachadas y tejas sueltas en diferentes cubiertas.

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