Cien mil traviesas acomodarán el avance de la alta velocidad entre León y La Robla

La traviesa polivalente es la piedra angular del avance del AVE al norte de León; la bibloque es un asiento acomodado a la planificación técnica que requiere la intervención, para sustentar la circulación de diferentes modelos. Adif centra en el tramo de León a La Robla uno de sus últimos esfuerzos para hacer posible la conexión en alta velocidad entre la capital leonesa y Asturias; obra en ejecución por un montante económico superior a los 52 millones de euros, que se aplicarán a la renovación de vía, la supresión de pasos a nivel y la instalación de nuevos raíles y carriles para este tramo y de la vega del Bernesga y el paréntesis contiguo de la Variante de Pajares.

Con toda la reforma en marcha, a la obra le queda aún un plazo de dos años más para definirse por completo; hay adjudicación en marcha que no tiene un horizonte definido de finalización hasta el umbral del año 2021; con esa suma, la intervención mínima para lograr abrir paso al tren de alta velocidad bajo la galería de la cordillera se acercará a las dos décadas.

El periodo de obra acaba de superar los quince años.

Para acotar y acercar los plazos se ha comenzado el suministro y reparto estratégico de 100.000 traviesas; se dividen en dos lotes, tanto por la procedencia como por la logística y encomienda de instalación, que se instalarán sobre la renovación del tramo de veinte kilómetros de vía entre León-La Robla y el montaje de vía en el interior de la variante. El proceso de adjudicación se acometió hace ya casi año y medio, cuando aún se creía factible un calendario diferente, un plazo más corto para la puesta en servicio de la nueva vía del AVE que unirá en otras condiciones el territorio asturleonés.

En el mismo encargo, se añadió el suministro y transporte de traviesas de ancho mixto para vía en placa destinadas a la dotación estructural y viaria del interior de la Variante de Pajares; en ese concepto se invertirán más de doce millones de euros. Estas traviesas con las que cimenta la vía de alta velocidad entre León y Asturias se permitirá compatibilizar la circulación de trenes de ancho estándar (1.435 mm) y ancho convencional (1.668 mm) por una misma vía, y que los trenes puedan desarrollar una velocidad máxima de diseño de 350 kilómetros por hora.

El despliegue de traviesas se extiende ya por casi la totalidad del tramo ferroviario León-La Robla, un a plataforma que pasará a formar parte de las líneas de alta velocidad una vez que se acometa el recambio; la intervención en este trecho se acompaña, además, de una construcción paralela de pasos a nivel el altura para asegurar el avance del tren, según los protocolos de seguridad exigidos para esta modalidad de transporte ferroviario.

Dentro de los túneles, se lleva a cabo la instalación de vía en las dos galerías de base, más de 24 kilómetros, con la configuración en la vía este de un ancho mixto de triple hilo, capaz de compaginar el avance de trenes por ancho ibérico e internacional, y dar continuidad al modelo que se ejecutará entre La Roba y León; la otra vía que recorrerá el interior de la cordillera discurrirá en ancho ibérico, con la afamada traviesa polivalente, para dar cabida a los mercantes, otra circunstancia clave de la Variante.

Las elecciones abren otra guerra por el ancho de la Variante

La última batalla de debate público por el ancho de vía que deba acompañar el paso de los trenes por la Variante de Pajares se libró la pasada primavera, en víspera de la cita electoral del 28 de abril. Las legislativas agitaron las posturas enconadas que mantienen PSOE y Foro y PP por la anchura del carril; por el concepto de tren de alta velocidad que, tal y como defendía Foro Asturias, sólo tiene cabida si se despliega con ancho internacional. El partido de Foro, ahora coaligado con el PP para concurrir en la misma candidatura parlamentaria por Asturias, defendió esta semana la expansión de la Variante de Pajares en ancho internacional; que se llevará a cabo, en el caso de que sea la formación conservadora la encargada de constituir el Gobierno de España tras la cita del 10-N. «Se trata de aspirar a una conexión por alta velocidad a las misma altura que disfrutan otros territorios del país, y abrir la competitividad de los puertos asturianos a las posibilidades de competir de los del resto del cantábrico», expuso Francisco Álvarez-Cascos. Por contra, el gobierno del Principado de Asturias, considera imposible que se pueda dar marcha atrás en el concepto técnico del triple hilo (mezcla de anchos internacional e ibérico en la Variante. «Es irreversible; el proyecto de la Variante de Pajares ya no admite marcha atrás», responde el gobierno socialista del Principado.