La consejería premia a cinco centros educativos por sus planes de calidad

La Consejería de Educación ha reconocido los planes y programas de calidad desarrollados por el colegio Divina Pastora de León, La Asunción de Ponferrada, el Instituto Astura de Mansilla de las Mulas, el CRA de Villacedré y el Instituto Álvaro Yáñez de Bembibre. Las menciones que entrega la Junta hacen referencia a los proyectos y las experiencias de calidad que los centros educativos desarrollaron durante el curso pasado y que muchos de ellos continúan en este curso. En total, repartidos entre las nueve provincias, la Junta ha reconocido el trabajo desarrollado por 45 colegios e institutos de la autonomía.

«En los últimos años estábamos viendo como los alumnos estaban perdiendo en expresión y compresión oral», explica la directora del Divina Pastora, Ana Belén Redondo, cuyo centro ha sido uno de los reconocido en el Plan de calidad por Pido la palabra. «Cada vez son más necesarias las habilidades sociales, hablar en público o códigos de conducta y hemos trabajado con los alumnos de las diferentes etapas estos aspectos», explica la directora del centro, quien añade que este curso cerrarán el plan con Dame una razón para escribir, con el que se trabajará la expresión y la compresión escrita en su alumnado.

El colegio La Asunción de Ponferrada también ha sido reconocido por su Plan de calidad, que se basaba «en la medición de indicadores informáticamente para saber si los procesos educativos mejoran año tras año», como concreta el director del centro, Luis Daniel Enríquez, quien añade que se trata «de un proceso continuo del que se encarga una comisión del colegio que cada año valora si se ha mejorado respecto al año anterior y en lo que nosotros trabajamos es en generar esas herramientas para que cada curso sea mejor».

La terna de centros leoneses premiados en la categoría de planes de calidad la completa el Instituto de Enseñanza Secundaria Obligatoria Astura de Mansilla de las Mulas, donde el curso pasado «se mejoró el espacio de la biblioteca y se organizaron los fondos, además de incorporar cinco ordenadores y ebooks», explica la directora del instituto Goyi Vázquez. Además de catalogar los ejemplares, en la información que ahora se ofrece de cada libro se incluyen aspectos como el argumento o el nivel educativo para el que está recomendado. Además, Vázquez precisa que el plan se completó con otro para fomentar la lectura. Justamente ayer, la Junta también reconoció su experiencia de calidad para la elaboración de un tríptico informativo en el que se indican todos los premios y reconocimientos, las optativas que se pueden cursar en el centro o el catálogo de servicios «para distribuirlo por los colegios o entre las familias durante el periodo de admisión», precisa la directora del Astura.

El Centro Rural Agrupado de Villacedré es el único centro leonés reconocido en la modalidad Mejores programas de calidad. El centro, como medida preventiva, se adelantó al protocolo que presentó la Junta el año pasado para concienciar y prevenir el acoso escolar y elaboró «una serie de indicadores en una tabla de doble entrada». «En el centro no existen problemas de convivencia, pero se trata de prevenir», explica la directora del CRA, Pilar Fernández, quien añade que se han ido dando pequeños pasos en cuestiones como aumentar la vigilancia en los patios y en las entradas y salidas al centro, a lo que también añadieron pautas para que los profesores sepan cómo actuar o cómo abordar el caso con las familias implicadas.

En la categoría de Mejores práctica de calidad se encuentra el Instituto Álvaro Yáñez, de Bembibre, donde el año pasado desarrollaron El uso del aula virtual y el entorno moodle como recurso para de atención a la diversidad. «Se trata de que el aula no sea sólo una herramienta para colgar actividades, si no convertirla en un recursos didáctico, un banco de ejercicios de diferentes asignaturas y diferentes niveles para poder atender a la diversidad», matiza la orientadora del instituto Álvaro Yáñez, para explicar que así los alumnos pueden recurrir al aula virtual tanto para mejorar en algunos aspectos en los que necesitan refuerzo como para ir más allá en asignaturas que les gustan o motivan, atendiendo así todas las posibilidades y demandas de los estudiantes.