Cs lamenta que Diez «se resigne» al retraso de Feve

Toda vez que el presidente de Renfe, Isaías Táboas, le ha trasladado que la vuelta de los trenes de Feve a la estación del centro de la ciudad «tardará otros tres o cuatro años, la reacción de nuestro alcalde ante semejante noticia ha sido la resignación», como criticó ayer la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento. Gemma Villarroel insistió en el «conformismo inasumible», de José Antonio Diez porque se trata del alcalde de la ciudad», quien «debería ser el primero en exigir que esta situación se resuelva».

Frente a las explicaciones de Diez, quien insistió en que no renuncia a la ejecución completa y trasladó la información recibida desde Feve de que no hay trenes tram para operar en el tramo urbano porque la adquisición tardará al menos tres años, la portavoz de la formación naranja apuntó que «los diferentes retrasos para que funcione el tren tranvía en la capital leonesa son excusas interminables». Villarroel incidió en que se deben a «una falta absoluta de apoyo y decisión políticas por parte del Partido Socialista y del gobierno del Ayuntamiento, algo que dista mucho de sus reiteradas críticas y demandas cuando ocupaban la bancada de la oposición». «El PSOE ha reivindicado el tema de Feve estando en la oposición y ahora resulta que, cuando ostentan el Gobierno, hacen lo mismo que el PP. La voluntad política no está ni se le espera», resumió la líder de Ciudadanos, quien avanzó que su partido preguntará «próximamente en el Congreso de los Diputados acerca del camino a seguir para resolver definitivamente esta integración ferroviaria en León».

Villarroel reseñó que «las demoras en la integración ferroviaria se deben en gran parte a una cuestión normativa» y citó «el caso del tranvía de la Bahía de Cádiz, un transporte urbano cuyo recorrido utiliza en parte las vías férreas gestionadas por la otra entidad responsable, Adif». «Definitivamente no puede ser tan difícil extrapolar la normativa andaluza, que ya está aprobada. Una burocracia de tres o cuatro años equivale a la legislatura completa. Una vergüenza», zanjó la líder de Cs, quien subrayó que, «tras meses de algaradas y consignas regionalistas, ahora nuestro alcalde capitula y acepta con naturalidad los nuevos plazos impuestos por sus jefes». «Si dependiera de la Junta, veríamos a un Diez muy distinto», porfió.