Diario de León

Golpe de autoridad

Cuarentena forzosa en Emilio Hurtado para 386 universitarios tras 21 positivos

La policía acordona la residencia a petición de Sanidad para evitar la fuga de estudiantes

León

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La gerencia de Atención Primaria se vio forzada ayer a dar un golpe de autoridad ante la fuga de estudiantes de la residencia universitaria Emilio Hurtado, donde se habían detectado 21 casos de coronavirus con otros 20 contactos directos que obligaban a sus 386 residentes a aislarse en sus apartamentos hasta someterse a las pruebas de detección y evitar así la posible propagación del virus.

El Sistema de Vigilancia Epidemiológica de la Universidad alertó por la mañana «de la escasa colaboración» que se estaba produciendo en la residencia, con entradas y salidas frecuentes del inmueble, y Primaria tomó cartas en el asunto solicitando ayuda a la Subdelegación del Gobierno para zanjar de raíz cualquier expansión del covid por no seguir las recomendaciones sanitarias.

De hecho, la Subdelegación envió a la Policía Nacional a acordonar el edificio y el propio gerente, José Pedro Fernández-Vázquez, y su equipo se desplazaron a la residencia para comprobar cómo se podía cuarentenar con eficacia a sus residentes y cómo podían estar atendidos hasta que se les practique el cribado que comenzó ayer y las posteriores comprobaciones con PCR. La dirección del centro les indicó que habrá servicio de cattering.

Cribado masivo el día 21

Los 12.000 miembros de la Universidad están llamados a un testeo intensivo el sábado en el campus

También llevaron un consentimiento informado para que cada alumno entienda que debe acceder al test de antígenos inicial y que incluye las recomendaciones que deben seguir durante la cuarentena.

La medida de confinar a los residentes como mínimo hasta efectuarles a todos las pruebas no es caprichosa, ya que la tasa de incidencia que arrojan los positivos detectados en Emilio Hurtado es muy elevada, de 8.000 por 100.000 habitantes, según indicaron, lo que significa 10 veces superior a la considerada de alto riesgo. Los casos confirmados en la residencia son hasta ahora asintomáticos, pero Primaria sospecha que saldrán a la luz más contagios cuando se completen los test de antígenos porque el contacto entre los residentes prosiguió.

En Vegazana se han contabilizado más de un centenar de infectados que implicaron aislar a otros 460 contactos estrechos. Por eso Epidemiología de la ULE en colaboración con Primaria puso en marcha un cribado masivo de antígenos en las residencias universitarias. La cuarentena de Emilio Hurtado se adopta para «impedir la entrada al campus de estudiantes que vienen de instalaciones con una incidencia alta sin saber si son infecciosos».

«Es la primera vez que se tiene que aplicar el reglamento y pedir una orden a la autoridad sanitaria, que se vio reforzada con la fuerza pública», reconoció el responsable de epidemiología Vicente Martín. El vicerrectorado de Actividad Académica recomendó al profesorado que tome las medidas para que el alumnado pueda seguir las asignaturas en el confinamiento. Además, el Programa de Voluntariado Covid de la ULE ayuda a los cuarentenados con las materias y compras esenciales.

El sábado se repetirá en el campus leonés la actuación de test masivos que ya se ensayó con éxito en San Andrés del Rabanedo. Las pruebas voluntarias están abiertas a toda la comunidad universitaria integrada por casi 12.000 personas, entre alumnos y trabajadores.

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