Una estación con más agua que trenes

La estación de trenes de León vuelve a hacer agua. Las instalaciones que en su día se instalaron con carácter provisional hasta la llegada del AVE no han sido remozadas durante las obras de ampliación y salen goteras repetidamente. El problema está en el diseño de la construcción. En el caso de la ‘vieja’ estación, el techo es plano y ayer mismo los operarios buscaban el lugar de la fuga que traspasa el agua hasta el vestidor. No lo han renovado y levantado otro con inclinación a dos aguas, como han hecho con la parte ampliada. Por la tarde, con el horizonte de una pantalla plagada de trenes cancelados, la imagen de una estación prácticamente vacía se llenaba con los cubos con los que se estaba recogiendo el agua de las goteras y una fregona. | m. romero