Febrero será la «puntilla» para el sector si no llegan ayudas directas

La mitad del comercio textil y de complementos que figuraba dado de alta antes de la pandemia de la covid-19 echará el cierre antes de mediados de marzo, un 25% adicional a las liquidaciones consumadas en 2020, según prevé el presidente de la patronal Acotex, Eduardo Zamácola.

La Asociación Empresarial del Comercio Textil, Complementos y Piel comunicó que las ventas de prendas de textil, hogar y complementos descendieron un 53,2% en enero con respecto al mismo mes de 2020. Las restricciones por la tercera ola del coronavirus y el temporal Filomena dejaron sin efecto las rebajas, que es el periodo donde el comercio hace caja.

El dato es para Zamácola «tremendamente negativo» y el peor para un arranque de ejercicio en 20 años (desde que Acotex recoge datos).

Pero lo peor aún está por llegar, a tenor de los vaticinios del presidente de la asociación que agrupa al sector.

Si no llegan las ayudas directas el presidente de Acotex cree que febrero «será la puntilla» para esta actividad, con otra pérdida adicional de unos 100.000 puestos de trabajo y una cadena de cierres «importante» cuando termine la temporada de invierno (mediados de marzo)».

Zamácola resumió que el sector acumula once meses consecutivos de caída de ventas y comentó que «muy al contrario de empezar a ir bien vamos a peor, el músculo se agota, ya no hay pulmón y muchos comercios están esperando a liquidar sus negocios. «Esta situación es generalizada», alerta el dirigente de la patronal, quien subrayó en conversación con Efe que «el problema es que no se ve luz».