El Gobierno «ultima» como en 2016 la vuelta de los trenes de Feve a León

Cuatro años después de que el entonces presidente del Adif, Gonzalo Ferre, anunciara en León que esa misma tarde se aprobaría el documento y diecisiete meses tarde de que, ya con el nuevo Gobierno, el PSOE avanzara que estaba se pendiente de los «últimos trámites», el Gobierno confirma ahora de nuevo que «la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria está ultimando la propuesta de un Real Decreto relativo a la explotación tranviaria de tramos de la Red Ferroviaria de Interés General» para que pueden volver a llegar a los trenes de Feve a la estación de Padre Isla. «Una vez éste se complete, se pondrán en marcha los trámites necesarios para su aprobación. La aprobación de este Real Decreto permitirá, a su vez, la aprobación de la normativa técnica complementaria necesaria para los subsistemas fijos, vehículos y operaciones», se reseña en la respuesta a la pregunta presentada en la Cámara Alta por el senador Antonio Silván.

Silván, que compareció junto a Ferre en el anuncio del 1 de junio de 2016, dos años antes de la moción de censura que desalojó al PP del poder, mostró ayer su «perplejidad ante el reconocimiento de Adif en 2020 de que aún no existe la normativa». «Sin normativa y sin Real Decreto, los trenes anunciados por el ministro Ábalos pueden ser también un bulo o no servir para nada porque el tren seguirá muriendo en puertas de la ciudad», concedió el senador y portavoz de los populares en el Ayuntamiento, quien subrayó que «el Gobierno pretende justificar el cierre de la línea y demuestra que la palabra de los responsables socialistas no tienen ningún valor».

La respuesta, fechada a 11 de marzo, fue exhibida ayer por el exalcalde para criticar que Ábalos «utiliza a la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria desde 2018 como excusa para seguir bloqueando la llegada del tren al centro», mientras que en cambio «durante esta crisis del coronavirus presionó» a este mismo organismo para que «se aprobara la puesta en funcionamiento de los trenes hospital en cuestión de días». Silván abundó en que «lejos de apostar por el fomento del tren de vía estrecha y el turismo, el Gobierno ha suprimido el Transcantábrico y el Expreso de La Robla, unos productos atractivos para atraer riqueza a León que han sido fulminados sin más alternativas o búsqueda de soluciones»; una eliminación que, como se cita en la red de trenes de gran lujo de Renfe, afecta a todos sus productos por la pandemia, pero que en el caso del Trancantábrico ya no contemplaba a León en el itinerario antes del virus. El senador reseñó que «este nuevo recorte manifiesta un claro desinterés y persecución contra la línea de vía estrecha leonesa». «En vez de apostar por dichos trenes reforzando las medidas de seguridad, se abandona el fomento del turismo interior que dice el Gobierno perseguir, perjudicando a un sector clave para León», expuso.

El exregidor se sumó al teoría de que el Gobierno quiere «justificar el cierre», que es la misma que utilizaba el PSOE en la oposición. Frente a esta crítica, en otra de las preguntas contestadas en el Senado, el Ejecutivo asienta que entre las previsiones del ministerio «no se encuentra la del cierre de la línea férrea León-Bilbao» e insiste en que trabajan en la «redacción de la normativa». El mismo anuncio que en el año 2016 y que en 2018, mientras Feve ya se ha dejado dos de cada tres de sus viajeros con los que contaba cuando dejó de entrar a la estación en septiembre de 2011.