La Guardia Civil investiga el crimen de Villavente también fuera de España

El equipo de la Policía Judicial de la Guardia Civil de León que se encarga de la investigación del crimen de Villavente ha trasladado fuera de España una parte de las pesquisas, con el fin de obtener pruebas respecto a la autoría del homicidio que se descubrió en la localidad del municipio de Valdefresno el pasado 27 de febrero, cuando se halló en un camino cercano a la población el cadáver de un joven dominicano de 25 años de edad, víctima de una muerte violenta ocasionada por al menos un disparo realizado a una distancia no demasiado lejana.

El juzgado de Instrucción número 2 de León mantiene el secreto del sumario de la causa, con la que se trabaja en al menos tres líneas de investigación desde el Instituto Armado, totalmente diferentes pero no excluyentes entre sí.

Una de ellas ha motivado que se abra una actuación fuera de España, con el fin de indagar respecto a determinados indicios que pueden conducir hacia el rastro de al menos una persona, aunque la tesis generalizada es que hubo varios implicados en la muerte del joven, que se había producido al menos dos días antes de la aparición del cadáver. Inicialmente se barajó la hipótesis de que la data de la muerte fuera la del domingo 23 de febrero, pero cada vez gana más cuerpo la posibilidad de que se produjera el martes 25 de febrero puesto que es el último día en el que se tiene referencia de contacto con sus allegados.

El fallecido estaba casado, si bien su esposa residía en Barcelona en los días del crimen. Había llegado a España de la mano de su madre y tenía más familia, además de un nutrido grupo de amigos, entre los que se iniciaron los interrogatorios para tratar de reconstruir las últimas horas de la vida del finado.

MUCHOS EFECTIVOS

En la investigación trabaja un nutrido grupo de profesionales de la Benemérita entre los cuales se encuentran los principales especialistas en cuestiones de esta materia. Trabajan a veces en turnos dobles y han realizado numerosos interrogatorios a personas que pudieran aportar alguna pista, pero de momento no han trascendido los resultados de las pesquisas, máxime con las instrucciones de la jueza al respecto.

Lo que sí ha quedado claro en las primeras semanas de instrucción es que se trata de un caso atípico y de especial complejidad, por las circunstancias que lo envuelven. Se mezclan diferentes ámbitos y culturas, que lo enmarañan un poco más si cabe, pese a que de momento las principales líneas de investigación ya están determinadas, a expensas de concretar cuál de todas tiene más visos de realidad.

La Guardia Civil se mantiene en permanente contacto con la familia, bajo la premisa de guardar la confidencialidad de los datos que se han ido extrayendo, que de momento no han sido transmitidos a los allegados para que no se entorpezcan las investigaciones que se llevan a cabo de forma intensa y con dedicación.

La zona en la que apareció el cadáver, un camino de concentración entre los pueblos de Villavente y Carbajosa, fue acordonada para preservar el escenario y recabar las pruebas forenses iniciales con el objeto de ayudar a esclarecer el crimen. Las primeras horas se antojaban especialmente relevantes para detener al autor del homicidio. Ahora que han avanzado las indagaciones se ha llegado a la conclusión asentada de que puede haber más implicados. Lo que no parece estar demasiado claro por ahora es el motivo que llevó a la trágica conclusión de lo que fue una disputa.