Cuestión de barrios
El Húmedo, Armunia, Puente Castro y El Crucero son las «zonas críticas» de León
El Barrio Húmedo, Armunia, Puente Castro y El Crucero son las «cuatro zonas críticas» de León según ha podido constatar el Ayuntamiento durante la primera ronda de encuentros con las asociaciones de vecinos. Desde el consistorio asumen que en esas áreas tendrán que prestar una atención especial a lo largo del actual mandato para tratar quejas que en, algunos casos, «vienen de atrás», como la saturación hostelera del casco antiguo o la falta de equipamientos en el sur de la capital.
Para el concejal de Participación Ciudadana, Nicanor Pastrana, que ha estado presente en todas las reuniones, y que ayer hizo balance, hay «problemas que se han ido cronificando a lo largo de los últimos años, como el ruido en el Barrio Húmedo, que impide conciliar el sueño», según le han trasladado las personas afectadas. También reconoció que «la suciedad, la desaparición de vida vecinal y la invasión de las zonas peatonales por las terrazas» son otras de las preocupaciones que comparten.
En cuanto a Armunia, el edil delegado del área señaló que sus vecinos sienten que hay un «déficit» en relación a la prestación de servicios. Denuncian igualmente la ocupación de algunas viviendas. «Generan conflictividad. Hay robos, armas y tráfico de sustancias», lamentó Pastrana, quien aseguró que harán «todo lo posible para ponerle remedio».
Las principales quejas de los vecinos ponen el acento en la inseguridad,la iluminación o el ruido
Una situación similar encontró en El Crucero, donde aprecia, tras hablar con los vecinos, «una zona de aspecto decadente en cuanto a los edificios», principalmente en las calles Relojero Losada y Laureano Díez Canseco. Del mismo modo entiende que hay «un problema de saturación de tráfico entre las glorietas. Están pidiendo a gritos una ronda norte», aclaró el concejal, quien también puso el acento en Puente Castro, que reclama un «polideportivo ya prometido en mandatos anteriores». Pastrana apuesta por «dar alternativas de ocio» a los jóvenes en esas zonas en declive.
No obstante, reconoció que solucionar algunas de estas situaciones «no es fácil» por la falta de presupuesto y por la madeja burocrática que implica. «Hay asuntos transversales que afectan al municipio, como la limpieza o la iluminación, el tema estrella en estas reuniones», declaró el edil, quien comprometió que a finales de marzo estará «terminada la auditoría externa para que las intensidades lumínicas se ajusten a la normativa europea». En abril abordará la segunda ronda de encuentros con los barrios.