Diario de León

Sucesos

La identificación del cadáver de San Cayetano resultará extremadamente compleja

El tiempo transcurrido y la falta de documentación hacen casi imposible conocer sus datos y la causa de la muerte

Área en la que se encontró el cadáver. MIGUEL F.B.

Área en la que se encontró el cadáver. MIGUEL F.B.

León

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El análisis previo al cadáver de la persona hallada en la tarde del lunes en una nave de piensos de Carbajal de la Legua, ubicada en las inmediaciones de la residencia de San Cayetano, se encontraba en tan avanzado estado de putrefacción que los doctores del Instituto de Medicina Legal de León consideran que será muy poco probable que a través de la autopsia se pueda averiguar su identidad y prácticamente descartaron que el cuerpo aporte alguna evidencia más para saber cuál es fueron los motivos del fallecimiento.

Se trata de un varón de mediana edad, que fue localizada por una persona que se encontraba en las inmediaciones de la nave. Mientras estaba realizando sus labores, a precio que en el almacén aparecían unos zapatos, cuya procedencia no le resultaba familiar.

Al inspeccionar el hallazgo y tratar de tirar de uno de los zapatos se dio cuenta de que se trataba de un cadáver, por lo que avisó inmediatamente a la Policía Local.

Dos patrullas del cuerpo municipal se personaron en la zona para realizar una primera inspección ocular, tras la cual comprobaron que el fallecido no aportaba documentación y que el estado de las ropas tampoco permitía realizar una labor de identificación, por lo que se decidió iniciar el protocolo reglamentario.

El Instituto de medicina legal procedió a recoger el cadáver, previa autorización del juzgado de instrucción, que ordenó el levantamiento del cadáver, al que se realizó la extracción de una serie de restos biológicos para enviar al Instituto Nacional de toxicología en Madrid.

La tarea resultará especialmente laboriosa, por cuanto en estos momentos ese tipo de trabajos tienen un tiempo de espera que hace pensar que la resolución del caso no va a ser inmediata.

Además, la revisión de los listados de personas desaparecidas y de ciudadanos en situación desfavorable que pudieran tener algún tipo de parecido con la persona finada no dió resultado positivo. Ninguno de ellos parece ser el referente al cadáver.

Una vez realizadas las labores pertinentes, se decretó el traslado de los restos mortales a las herederas de la nueva, donde se procedió a la elaboración del análisis y del informe correspondiente. Los primeros datos dejan todo en el aire y significa la imposibilidad de aportar un nombre y una causa de fallecimiento para esta persona.

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