Investigadores en formación de la ULE piden a las instituciones más medidas para su labor
Diversos colectivos reclaman sensibilidad con sus propuestas y capacidad de reacción
Un grupo de distintos colectivos relacionados con la investigación y la actividad científica en España, (entre ellos la Asociación de Investigadores en Formación de la Universidad de León AIF-ULE), remitieron un comunicado a la consejera de Educación de la Junta, María del Rocío Lucas Navas, y a la comisionada para la Ciencia y la Tecnología, Pilar Garcés García, en el que solicitan públicamente que se adopten medidas «para mitigar los efectos de la pandemia en el sistema de Castilla y León de Ciencia, Tecnología e Innovación».
El texto comienza expresando la valoración positiva del hecho de que se hayan tenido en cuenta las necesidades y particularidades del sistema de Ciencia, Tecnología e Innovación en las medidas de mitigación de los impactos económico y social del estado de alarma. Los firmantes afirman ser plenamente conscientes del esfuerzo que se ha realizado «para apoyar el desarrollo de la investigación y la actividad científica en nuestra comunidad autónoma mediante el fomento de la incorporación de jóvenes investigadores a través de programas de financiación de contratos predoctorales o de técnicos de apoyo a la investigación, las convocatorias para la financiación y apoyo a proyectos y de adquisición de equipamiento científico compartido INFRARED, y la consolidación de Grupos de Investigación».
En esa misma línea, el comunicado indica que «sabemos que el actual Gobierno de la Junta apuesta por la I+D+i como motor de desarrollo en la región y, precisamente para proteger el sistema de ciencia e investigación de nuestra comunidad autónoma, nos parece fundamental emprender medidas específicas destinadas a mitigar el impacto negativo que el brote pandémico y las disposiciones para su contención van a tener sobre nuestro sistema».
La actual situación provoca cientos de investigadores en Castilla y León hayan paralizado su actividad en las materias que requieren presencialidad, ya sea por la restricción de acceso a laboratorios científicos y centros tecnológicos y de investigación, o por los recursos de diferente índole que no pueden usar.