El juicio de la Púnica roza el surrealismo y ahora se detiene durante veintiún días
Cirenia Villacorta: «Me parecería improcedente entregar los pliegos a un aspirante»
El juicio por la pieza leonesa de la Operación Púnica dio por cerrada la semana en curso en martes y no se reanudará en principio hasta el 10 de enero, cuando se programa una nueva tanda de testificales hasta el día 13, que se complementará con otra tirada de cuatro sesiones del 23 al 26 de enero. Y eso en el mejor de los casos. Porque no sería de descartar que la vista oral, que se inició 19 de noviembre, también haga incursión en el calendario de febrero.
De la última jornada del año 2022, lo más destacado fue el testimonio de Cirena Villacorta, secretaria general de la Diputación: «Me parecería improcedente entregar los pliegos de un concurso a un aspirante», contestó a la fiscal carmen García-Cerdá cuando se le preguntó por la tesis de las fiscales anticorrupción, según la cual Barazón ofreció condiciones a medida a las empresas de Alejandro de Pedro para explotar las cafeterías de la estación de San Isidro, a cambio de una tarea de mejora de la reputación online de la imagen del candidato a presidir el PP de León, que sospechaba que no contaba con el visto bueno de la ejecutiva autonómica.
También tuvo miga la intervención de José Luis Arranz, jefe de Prensa de la Diputación en aquella etapa. Preguntado por si Jesús López, el interventor de la Diputación, estaba al tanto de las negociaciones con Eico y Madiva fue conciso: «Por supuesto, aunque no asistía a las reuniones. Estoy convencido de que él conocía los planes, si no nunca hubiera tramitado las facturas», afirmó con rotundidad.
En la réplica al representante legal del interventor dijo: «No recuerdo que hayamos recibido facturas de esas empresas, pero tuvo que recibirlas porque si no, no se pagarían». El criterio de pago era «el mismo que con cualquier medio de comunicación local».
«La imagen de Isabel Carrasco estaba muy deteriorada y ella llamó a estos señores para hacer trabajos de mejora», reconoció. «Yo participé en algunas reuniones junto a Susana Martínez. Sólo conocía a Alejandro de Pedro».
La defensa de Alejandro de Pedro protestó por la incorporación de un informe de reputación de mayo de 2016 que las defensas desconocían. Arranz insistió: «Yo no controlaba la difusión de los trabajos de reputación. Yo estaba muy centrado en las ruedas de prensa y en las notas de prensa».
Explicó cómo fue cesado «porque todos los viernes se reunía con los diputados. Unos días antes estuvimos en Ponferrada y a Isabel le molestó algo. Hablamos de la Vuelta a León, se enfadó mucho y chillamos los dos. Al día siguiente Marcos me anunció mi cese como jefe de Prensa», resumió.