Nuevas luciérnagas para el Camino

Las localidades jacobeas, una veintena de ellas en la provincia de León, están preparadas para recibir, con seguridad, a los peregrinos, que son «esas señales luminosas, como las luciérnagas que indican que la vida vuelve a la normalidad», después de «muchos meses de preocupación, duda y desasosiego» de no poder disfrutar de este viaje por la pandemia de la covid-19. Así lo explica el presidente de la Asociación de Municipios del Camino de Santiago, quien asegura que, desde este mes de junio, las comunidades y pueblos de la Ruta Jacobea esperan contar con muchos peregrinos, si continúa la evolución favorable de la pandemia y la creciente población vacunada. Informa de que, tras el levantamiento del estado de alarma el 9 de mayo, «estamos viendo, con mucha rapidez, un retorno» de caminantes nacionales e internacionales al Camino de Santiago, que atraviesa Navarra, Aragón, La Rioja, Castilla y León y Galicia en su ruta francesa, en un recorrido de casi 1.000 kilómetros.

«En menos de un mes estamos casi al 20% de caminantes y es posible pensar que podemos recuperar un porcentaje bastante elevado, entre el 70% y 80% de los que había antes de la pandemia», ya que «hay muchas personas que postergaron y paralizaron hacer el Camino de Santiago y que ahora lo retoman».

Según los datos de esta Asociación, ya hay más de 70 albergues abiertos, de los más de 135 que están en la base de esta red de municipios, a los que se suman pensiones, casas rurales, hostales y hoteles en toda el trayecto. Hermoso de Mendoza incide en la seguridad con la que la Ruta está preparada para recibir a los peregrinos y visitantes y, en lo que concierne a los albergues, recuerda que en los meses de confinamiento, «se aprendió mucho y los alojamientos adoptaron protocolos muy rigurosos y muy serios».