Piden 20 meses de cárcel para un guardia que estaba fuera de servicio
AUGC cree que la llegada de María Gámez a la dirección ha remilitarizado el cuerpo
La Fiscalía Togada Militar pide veinte meses de prisión para un agente de la Guardia Civil destinado en León por unos hechos que se produjeron cuando se encontraba fuera de servicio, y en los que intervino otro miembro de la Guardia Civil, de superior empleo, en labores administrativas. El juicio comenzará en los próximos días en el Tribunal Militar Territorial de La Coruña.
La acción penal, según denuncia la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) surge a impulso del mando militar que remite lo actuado a la jurisdicción militar, a pesar de que los hechos habían sido calificados como falta disciplinaria y no como delito y menos de la jurisdicción militar.
«Nuevamente, por tanto, una mera discrepancia deriva, en aplicación del injusto y arbitrario Código Penal Militar, en la posibilidad de que un trabajador acabe entre rejas, una situación inverosímil en cualquier Estado de derecho. Y es que, además, desde hace unos meses, AUGC está constatando que se ponen en conocimiento, por los mandos de la Guardia Civil a los órganos de la jurisdicción militar, hechos en los que intervienen miembros del Cuerpo, sucedidos en actuaciones policiales o, incluso, fuera de servicio, entre miembros de la Guardia Civil, haciendo una interpretación extensiva y desorbitada de las competencias de la jurisdicción militar y de la aplicación del Código Penal Militar», explica una nota de prensa.
«Estamos ante una situación de remilitarización de la Guardia Civil y de una involución en los derechos de ciudadanía de los y las Guardias Civiles, coincidente con la llegada a la Dirección General de la Guardia Civil de María Gámez», sostiene AUGC.
De la situación que ahora vive el compañero de León «encontramos numerosos precedentes en meses recientes», cita AUGC recordando un caso de Sevilla.