La plantilla de Elmar acepta el ERE y busca soluciones para futuros despidos
En la votación participó el 85% de la plantilla y 86 trabajadores votaron a favor.
Imagen de la manifestación que tuvo lugar el pasado día 16 como protesta por el ERE.
Tras semanas de negociaciones fallidas, la empresa de congelados Elmar y sus trabajadores han llegado a un acuerdo por el que se acepta el Expediente de Regulación de Empleo, ERE, de reducción de la jornada consistente en «15 días trabajados y 15 días con la empresa cerrada» que afecta a 1
52 empleados dedicados, sobre todo, a tareas de producción. No obstante, ésta era la propuesta, aunque tal y como confirmó ayer en representación del comité de empresa Mar Mirantes, «es una parte técnica que depende de los abogados».
Asimismo, Mirantes apuntó que en la reunión mantenida con la dirección de la empresa se garantizó para los afectados por el ERE cuatro meses de trabajo con compromiso de futuro así como el disfrute del periodo vacacional íntegro «como si no se estuviese en el ERE».
Por otro lado, en la asamblea, que tuvo lugar en la Delegación Territorial de Trabajo y cuyos responsables actuaron como mediadores entre ambas partes, también se acordó la redacción de un plan de viabilidad a una empresa externa. En este punto Elmar y sus trabajadores determinaron que «si en un futuro dicha compañía quiere regular la situación de los 68 trabajadores restantes que no están incluídos en el ERE, dicha regulación no puede afectar a más del 15% de los empleados», confirmó Mirantes.
No obstante, cuando la empresa en cuestión presente su modelo de actuación, «se sentarán a analizar la situación», declaró la representante del comité de empresa.
Otro punto abordado en la reunión y que sirvió como elemento para que finalmente se llegara a un acuerdo fue el hecho de que la empresa ofreció a los trabajadores como anticipo el complemento salarial hasta completar el 100% del salario neto que cobra cada empleado. Mar Mirantes definió esta medida como «anticipo» ya que «al solicitarlo la asamblea a la Junta, éstos devolverán la cantidad a la empresa y, en caso de que no sea así, quien perdería el dinero sería la empresa y no los trabajadores».
Una vez finalizada la asamblea, se produjo la votación en la que, finalmente, se decidió aceptar el ERE con una participación del 85% de la plantilla, en la que 86 trabajadores votaron a favor y 25 en contra.