La presa Blanca sale de nuevo a la luz

Las obras de renovación del colector de la avenida Alcalde Miguel Castaño han sacado a la luz el rastro de una de las infraestructuras de los tiempos en los que el entorno estaba aún salpicado de pequeñas huertas. La excavación abierta ha permitido volver a ver parte de las presas que venían desde el barrio del Ejido, como advierten los más curiosos. La zanja abierta a la altura de la calle Conde Ansúrez desvela una de las arcadas de la presa Blanca, que partía del Torío a la altura de Villaobispo y cruzaba por los barrios del Ejido y La Puentecilla hasta desembocar en Puente Castro, como dejó documentado Maximiliano González Flórez. En esta zona concreta ahora descubierta, el agua discurrió a la vista hasta los años 80, después del proceso de entubamiento que las cegó a partir de los años 60. | á. caballero