La provincia liderará el crecimiento económico de la comunidad este año

La economía leonesa creció en 2021 el 5,1% y las estimaciones de los analistas apuntan a que el PIB engordará este año otro 5,7% si se mantiene la misma evolución del empleo y el consumo repunta, algo que dependerá del comportamiento de la pandemia. Ambos indicadores están por encima de la media autonómica y solo Zamora (5,5), Soria (5,3) y Salamanca (5,3) superaron a la provincia el pasado ejercicio. En 2022 ninguna crecerá más que León, según se desprende del informe del cuarto trimestre sobre la ‘Situación económica y perspectivas’ de la comunidad que ayer publicó Unicaja Banco.

Esta tendencia positiva, que arrancó con fuerza justo antes del verano, se asienta, sobre todo, en dos sectores clave, como son el de la construcción y el turismo, que lideran la recuperación tras la irrupción de la emergencia sanitaria que disparó las tasas de desempleo a lo largo de 2020. En el estudio firmado por la entidad financiera destaca el incremento que a lo largo de todo el año pasado experimentó la licitación pública, que movilizó en León, entre enero y octubre, 238,9 millones de euros, la cantidad más alta del conjunto autonómico, que supuso, en terminos interanuales, un aumento del 41% respecto al primer año de la pandemia. Eso se traduce en más contratos de trabajo y menos paro. También mejoró la obra civil, con una inversión de 195,3 millones, la mayor de Castilla y León durante ese periodo.

Otro sector importante que tira de la economía leonesa es el del turismo, con mucho peso dentro del PIB provincial debido a la proliferación de comercios y negocios dedicados a la hostelería. La llegada de casi 500.000 turistas hasta octubre —56.000 extranjeros—, acompañada de un aumento de las exportaciones y de un repunte moderado del consumo, rebajaron la cifra de parados a niveles prepandemia. Lo más llamativo en este sentido es que el número de ocupados aumentó en la provincia el 7,3% durante el tercer trimestre, muy por encima del resto de los territorios, lo que permitió que la tasa de actividad no fuera la más baja de España, como ocurrió en los dos trimestres anteriores.

El informe subraya además la reactivación del mercado inmobiliario y recoge igualmente otros indicadores empresariales, como el impulso en la creación de empresas o el aumento en la matriculación de vehículos, con un 13,8% más de ventas hasta octubre.