Los recipientes se recogen en un camión y se vacían fuera de la zona

Los responsables municipales reseñan que el casco histórico es «la principal fuente de residuos de vidrio comercial». Para atender este espacio, desde la concejalía de Desarrollo Urbano reseñan que el sistema de recogida ideado con Ecovidrio permite «garantizar un buen nivel de eficacia» en unas zonas de «alta concentración de servicios de restauración» y con calles «estrechas y muy turísticas», en las que además «el sistema de recogida neumática se ve gravemente perjudicado por el vertido de vidrio».

Los hosteleros tienen que almacenar el vidrio de manera separada en los cubos que les facilita Ecovidrio y sacarlos en los horarios y días que marcan los responsables del sistema. El problema, como inciden los titulares de los establecimientos, está en el tiempo que pasan en la calle hasta que pasan a recogerlos alrededor de las 05.00 horas de la madrugada, aunque también hay una opción a las 11.00 horas. Los operarios de la empresa recogen los recipientes, los cargan en los camiones y los vacían fuera del casco histórico, en los almacenes municipales del paseo del Parque, para evitar el ruido del vertido que habían denunciado ya los vecinos cuando se utilizaban los iglús de la calle.

La operación se completa con la devolución de los contenedores para que los hosteleros puedan volver a utilizarlos. Sólo se les permite emplearlos para su volcado directo en los iglús las madrugadas de los martes, jueves y viernes, según la documentación que han enviado desde el Ayuntamiento de León, que había comenzado con las gestiones y primeros pasos del sistema en el pasado mandato, cuando surgieron las críticas iniciales. Ahora, los titulares de los establecimientos reclaman otra vez que se ajuste.