Rogelio Blanco en tierra de libertad

El Palacín se quedó pequeño ante la expectación y asistencia que generó la primera de la conferencias del ciclo de las jornadas Cuna del Parlamentarismo. Rogelio Blanco, a través del hilo conductor de su León, tierra de libertades, certificó la profundidad de ese pasado y la necesidad de beber de la enseñanza de la historia, de combatir a los memoricidas, para tener una referencia correcta. «Como dijo Wellintong, un país grande no sería tal sin ganar una gran batalla; y León tiene esa batalla de la leonesidad», abundó Blanco sobre las referencias que «acercan el pasado para no avanzar a ciegas».